La Policía británica ha iniciado hoy un nuevo interrogatorio a las siete personas que cenaron con el matrimonio McCann la noche en la que su hija Madeleine desapareció de la habitación en la que dormía con sus hermanos en la localidad lusa de Praia da Luz, en el Algarve, pocos días antes de cumplir cuatro años de edad.
Se trata de la segunda ocasión en la que el grupo, conocido como los 'Siete Tapas', respondan en calidad de testigos a preguntas relacionadas con la ausencia de las pequeña, tras las que afrontaron el pasado año con agentes portugueses, que también estarán presentes en las nuevas sesiones en Reino Unido representados por el responsable de la investigación desde el mes de octubre, Paulo Rebelo, quien ayer llegó a las islas junto a dos colegas.
No obstante, el cuestionario, que se desarrollará previsiblemente hasta final de semana en Enderby, en el cuartel general de la policía de Leicestershire, lugar de residencia de los McCann, sólo contará con la asistencia de Rebelo, que no podrá interpelar a los testigos de forma directa. Con todo, la batería de preguntas respondió a un acuerdo conjunto de investigadores de ambos países, tras la intermediación del Ministerio del Interior británico.
Por su parte, el portavoz de la familia, Clarence Mitchell, aseguró que el objetivo de esta nueva ronda es eliminar las contradicciones en la sucesión de los hechos de la Policía lusa. Aún así, los padres de la pequeña no tomarán parte en esta fase de la investigación, si bien confían en que el testimonio de sus siete compañeros de mesa conduzca a la retirada del estatus de 'arguido', la figura empleada por la Policía portuguesa para denominar a los sospechosos oficiales y que mantienen desde septiembre por su supuesta implicación en la ausencia de la niña.
TESTIGOS
En este sentido, ninguno de los siete contará con abogados en los interrogatorios, puesto que participarán en calidad de testigos, no de sospechosos, y la primera en declarar será Jane Tanner, la amiga del matrimonio de médicos que aseguró a los detectives portugueses que la noche en que Madeleine desapareció había visto a un hombre llevando un niño en brazos cerca del apartamento de la familia.
Además, la Policía también prevé citar a los parientes y consejeros que estuvieron con el matrimonio los días inmediatamente posteriores al 3 de mayo, en los que arrancó la investigación de la desaparición de la pequeña. Paralelamente, los abogados de los McCann han solicitado que en torno a una veintena de testigos sean interrogados, incluido el personal del complejo Ocean Club en el que pasaban sus vacaciones y otros veraneantes británicos.
No obstante, el cuestionario, que se desarrollará previsiblemente hasta final de semana en Enderby, en el cuartel general de la policía de Leicestershire, lugar de residencia de los McCann, sólo contará con la asistencia de Rebelo, que no podrá interpelar a los testigos de forma directa. Con todo, la batería de preguntas respondió a un acuerdo conjunto de investigadores de ambos países, tras la intermediación del Ministerio del Interior británico.
Por su parte, el portavoz de la familia, Clarence Mitchell, aseguró que el objetivo de esta nueva ronda es eliminar las contradicciones en la sucesión de los hechos de la Policía lusa. Aún así, los padres de la pequeña no tomarán parte en esta fase de la investigación, si bien confían en que el testimonio de sus siete compañeros de mesa conduzca a la retirada del estatus de 'arguido', la figura empleada por la Policía portuguesa para denominar a los sospechosos oficiales y que mantienen desde septiembre por su supuesta implicación en la ausencia de la niña.
TESTIGOS
En este sentido, ninguno de los siete contará con abogados en los interrogatorios, puesto que participarán en calidad de testigos, no de sospechosos, y la primera en declarar será Jane Tanner, la amiga del matrimonio de médicos que aseguró a los detectives portugueses que la noche en que Madeleine desapareció había visto a un hombre llevando un niño en brazos cerca del apartamento de la familia.
Además, la Policía también prevé citar a los parientes y consejeros que estuvieron con el matrimonio los días inmediatamente posteriores al 3 de mayo, en los que arrancó la investigación de la desaparición de la pequeña. Paralelamente, los abogados de los McCann han solicitado que en torno a una veintena de testigos sean interrogados, incluido el personal del complejo Ocean Club en el que pasaban sus vacaciones y otros veraneantes británicos.
