El otro magosto de Ourense

Pasada la fiesta, un año más, tratamos de ponerle fin a tanto desmán. Lo que se ve en las imágenes es parte de la cantidad de basura que después de los magostos quedó en la Atalaya de Monterrey. Miles de botellas de vidrio, miles de latas de refresco, toneladas de basura para disfrutar. ¡Cómo dejan el monte! ¡Qué falta de educación! Se puede disfrutar de la fiesta y después recoger los desperdicios.

Te puede interesar