Los vecinos están esperando desde noviembre que la Xunta evite el hundimiento de la calzada

El agua de un regato desgasta la carretera de Santo André

Estado de la carretera que enlaza el Eixo do Ribeiro con Valdepereira, a la altura de Santo André. (Foto: MARTIÑO PINAL)
La carretera OU-211, que enlaza el Eixo do Ribeiro con Valdepereira de Ribadavia, tiene un tramo de carril prácticamente inutilizado en el mismo pueblo de Santo André de Camporredondo desde el pasado mes de noviembre. Los vecinos de la localidad temen que ceda la calzada y provoque un accidente de circulación. El origen del deterioro está en la canalización subterránea del agua de un regato, que se ha obstruido como consecuencia de las fuertes lluvias del pasado otoño y el arrastre de tierras.
El atasco de la tubería que pasa por debajo de la carretera provoca que el agua y la tierra que arrastra desborde la calzada y vaya minando poco a poco el talud del otro lado, que ya presenta un gran socavón, que ha dejado incluso un pequeño tramo del asfalto sin ningún tipo de apoyo.

El riesgo de hundimiento impide el paso de dos vehículos y pone en serie peligro la circulación, fundamentalmente, de camiones.

Técnicos de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras han inspeccionado el lugar, pero por el momento no se han ejecutado las obras de reparación. Ante el requerimiento de los vecinos, el Concello de Ribadavia procedía a colocar señales para evitar que los coches se acerquen al margen derecho de la calzada en dirección a Valdepereira. Posteriormente, la Xunta también instalaba señales de reducción de la velocidad.

Como la solución se retrasa, vecinos afectados han transmitido al grupo municipal del BNG su preocupación por el riesgo que entraña. El portavoz, Anxo Collarte, declaraba que 'xa o tratamos nun pleno anterior e agora presentamos un escrito para que o Concello inste á Consellería de Medio Ambiente a arranxar canto antes a carretera, tendo en conta ademais que fai aproximadamente dous anos que se asfaltou de novo'. El edil añadía que el 'desbordamento dun regueiro sobre o pavimento da vía e sobre os terreos de casas particulares colindantes e o achicamento da estrada polo socavamento dos taludes que sosteñen as beiras da mesma estrada son os problemas que afectan a veciños e conductores'. Este grupo de la oposición considera que 'para veciños e transeuntes resulta indignante a ausencia de actuacións para resolver este problema de seguridade vial e evitar problemas maiores nun patrimonio público logo de varios meses de deixadez por parte das administracións'.

El concejal de Servicios Públicos, Ignacio Gómez, declaró que 'non recibín ningunha queixa dos veciños pero estamos dispostos a dirixirnos de novo á Xunta para que execute as obras porque a estrada é da súa competencia'.

Te puede interesar