El elenco de Elena Seijo hizo un guiño a los niños que huyen de la guerra
Los más pequeños fueron los protagonistas de la tercera jornada de la Mostra con una representación teatral en la que Aladino, un niño que nació en medio de una devastadora guerra, les invita a pasar con él más de 50 minutos cargados de aventuras inesperadas y mucha magia. Niños, padres y abuelos se dieron cita ayer minutos antes de las 19,00 en el Auditorio municipal para disfrutar del espectáculo "Aladino e a lámpada marabillosa cruzan fronteira", que la compañía gallega Geppetto del aula de Teatro Infantil del Campus de Ourense les tenía preparado.
Juntos recorrieron un largo camino con un único objetivo: mudarse a otro país y empezar una nueva vida sin miedo de amanecer con un nuevo ataque terrorista. Aladino, muy unido a su madre, cayó en la trampa de un mago malvado que lo reclutó obligándolo a conseguir una lámpara de una cueva cercana a la frontera poniendo los nervios a flor de piel de un público muy atento al espectáculo que estaban siguiendo.
La dramaturgia de Elena Seijo, a cargo de la dirección del equipo, y su elenco de actores hicieron que los niños pasasen una tarde diferente sumergiéndolos en un mundo de fantasía con una puesta en escena impecable.
La programación de la jornada de ayer la completó el equipo de Esteve Soler con su espectáculo "Contra el progreso", un conjunto de siete obras con un fuerte carácter satírico en las que se realiza un repaso al mundo actual.
Hoy continúa la 21ª edición de la Miteu con más actividades. La actriz chilena Carolina Pizarro, ajo la dirección de Julia Varley, realizará una demostración de trabajo titulada "De Amagaki a Shibugaki, geografía de un aprendizaje", en la que compartirá su experiencia en escena y la influencia de la realidad política y social en su dramaturgia. La cita será a las 18.00 horas en la sala Pardo Bazán del Edificio de Ferro. Más tarde, a las 20,30 horas, el Auditorio acogerá "La cantante calva", a cargo de Eugène Ionesco.
