La empresa Amencer Reciclado retiró ayer el expediente de regulación de empleo (ERE) que había presentado para despedir a 20 de los 37 trabajadores de la plantilla. Según explicó el administrador de la entidad, Juan Luis Díaz Pulido, la situación de la empresa es muy complicada y la medida ya no sería efectiva, hasta el punto de que van a replantearse su continuidad. Amencer Reciclado ya había presentado voluntariamente un preconcurso de acreedores y el administrador señaló que, si bien no está aún adoptada la decisión, probablemente tengan que entrar en concurso.
Dijo este administrador que el futuro de la empresa se podría conocer la próxima semana, y depende fundamentalmente de la renovación del convenio de actividad con el Concello. En este sentido, según explicaba la edil de Limpieza, Susana Bayo, la institución municipal está preocupada por el futuro de los trabajadores y están dispuestos a renovar dicho convenio, e incluso incrementar la cuantía por la que se realiza (el año pasado había sido de 80.000 euros, si bien no precisó la cantidad por la que se podría efectuar en 2013).
En todo caso, Díaz Pulido indicó que la empresa está buscando opciones para poder pagar a los trabajadores las nóminas pendientes, negociando con entidades financieras para que anticipen el importe de unas subvenciones ya concedidas por la Xunta, pero que aún no se han hecho efectivas.
No obstante, la empresa no percibirá los 35.000 euros que reclamaba al Concello y que la institución municipal reconocía como pendientes de pago, después de que los técnicos municipales detectasen que ese dinero ya fue pagado en 2011. 'Hubo un error', reconocía la concejala Susana Bayo, quien alegaba que, así las cosas, el Concello no debe nada a la empresa.
También Díaz Pulido reconocía la equivocación de la reclamación, señalando que el dinero se había abonado a Aspanas y no directamente a Amencer Reciclado. La empresa reclamaba otros pagos al Concello (que éste no reconoce) y, según señaló Díaz Pulido, podrían desistir de ellos a cambio de 'compensaciones' en el convenio que negocian para 2013.
En todo caso, Díaz Pulido indicó que la empresa está buscando opciones para poder pagar a los trabajadores las nóminas pendientes, negociando con entidades financieras para que anticipen el importe de unas subvenciones ya concedidas por la Xunta, pero que aún no se han hecho efectivas.
No obstante, la empresa no percibirá los 35.000 euros que reclamaba al Concello y que la institución municipal reconocía como pendientes de pago, después de que los técnicos municipales detectasen que ese dinero ya fue pagado en 2011. 'Hubo un error', reconocía la concejala Susana Bayo, quien alegaba que, así las cosas, el Concello no debe nada a la empresa.
También Díaz Pulido reconocía la equivocación de la reclamación, señalando que el dinero se había abonado a Aspanas y no directamente a Amencer Reciclado. La empresa reclamaba otros pagos al Concello (que éste no reconoce) y, según señaló Díaz Pulido, podrían desistir de ellos a cambio de 'compensaciones' en el convenio que negocian para 2013.
