Un centenar de expertos analizan el cambio climático en la 8ª Conferencia de la Unión Geofísica Europea Inundaciones y sequías son los retos del II Congreso Internacional da Auga
Al término del pasado año hidrológico, comprendido entre el 1 de octubre de 2015 y el 30 de septiembre de 2016, la media de precipitaciones en la cuenca del Miño-Sil fue un 30% superior a la registrada en las últimas cuatro décadas. Eso sí, concentradas en cinco meses, entre enero y mayo de este año. "Una situación, de periodos de intensas lluvias con otros prolongados de sequía, con la que tendremos que aprender a convivir en el futuro", indicó el presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, Francisco Marín Muñoz, durante la inauguración del II Congreso Internacional da Auga y de la 8ª Conferencia de la Unión Geofísica Europea, celebradas en el Marcos Valcárcel. Ambas citas, destacó el rector de la Universidade de Vigo, Salustiano Mato, se enmarcan dentro del proyecto de especialización Campus da Auga del campus ourensano.
El cambio climático reúne estos días en la ciudad, en el Marcos Valcárcel, a más de un centenar de expertos con el fin de atenuar los efectos de fenónemos extremos como las inundaciones y las sequías. "Una oportunidad para saber gestionar mejor los recursos hídrico s que tenemos en la provincia", destacó el vicepresidente de la Diputación, Rosendo Fernández.
Un foro de encuentro, de marcado carácter internacional, "del que se extraerán conclusiones que nos ayudarán a todos a vivir en armonía con el medio ambiente y con los diferentes ecosistemas que nos rodean", matizó el alcalce de la ciudad, Jesús Vázquez. En este sentido, la demarcación Miño-Sil tiene 490 kilómetros de riesgo susceptible de inundación "por lo que este este congreso es una oportunidad para que expertos intercambien experiencias en el estudio de los fenómenos extremos y para conocer los últimos avances", destacó Marín.
Precisamente, la Confederación, con el fin de mejorar el conocimiento de las cuencas internacionales del Miño y del Limia, presentó recientemente el proyecto Risk Miño-Limia, "con el que pretendemos invertir 2,5 millones de euros en conocimiento", indicó Marín. "Es la primera vez en la que estudiaremos en profundidad nuestra cuenca para poder gestionar de un modo más eficiente episodios de fuertes precipitaciones o falta de ellas", añadió. En el proyecto también participan la Universidade de Vigo, la Confederación Hidrográfica del Norte de Portugal y la Universidad de Oporto.
El investigador Diego Miralles, profesor en la Universidad de Gante, estudia el efecto del cambio climático en el ciclo hidrológico. "Tenemos tendencia hacia el secado de los suelos y esto hace que tengamos menos evaporación de agua y menos formación de nubes. Es una especie de círculo vicioso", matizó Miralles. "Los modelos climáticos nos indican que la zona del Mediterráneo va a estar más afectada. Esto implica que nos volvemos un poco más como el Sáhara", añadió.
