Será condenado por el Juzgado de lo Penal 2 de Ourense a seis años y ocho meses de prisión tras haber reconocido ayer que fue el autor de un oleada de atracos perpetrados entre el 5 y el 9 de octubre de octubre del pasado año en distintos puntos de la ciudad.
Sin embargo, pese a los años de prisión que le impondrá la sentencia -un año y cuatro meses por cada uno de los cinco robos con intimidación-, Óscar Manuel Fernández Ucha estará en prisión cuatro como máximo. Y ello, según explicó el fiscal Julián Pardinas, en aplicación del artículo 76 del Código Penal que impide a un penado cumplir 'más del triple de la pena más grave que se le imponga'.
La acusación pública, a la hora de fijar el año y cuatro meses de prisión por cada uno de los atracos, aplicó la atenuante de drogadicción al inculpado.
EL PERIPLO
Fernández Ucha reconoció que el 5 de octubre de 2012, poco antes de las diez de la noche, accedió a una tienda de golosinas de la calle Concordia e intimidó con un objeto punzante a la empleada para que le entregase los 80 euros de la caja registradora. Un día después entró en la zapatería Cuplé, en la calle Concordia, e intimidó con una navaja a la dueña, consiguiendo apoderarse de 250 euros.
En los dos siguientes días hizo lo propio en dos panaderías de la avenida de As Caldas. En 'Punto negro' se apoderó de 200 euros y en 'Sabucedo' consiguió 400. En ambos casos se valió de una navaja para exigir la entrega del dinero.
Antes de que fuera detenido e ingresase en prisión, aún atracó otro negocio el día 9 de ese mismo mes: una peluquería de la calle Faustino Santalices, donde empleó un cuchillo de cocina que le colocó a la altura de la cadera a la propietaria para robar los 225 euros que había en el negocio.
La Policía Nacional lo detuvo a las 21,50 horas de ese mismo día en la plaza de Covadonga. En su poder, tenía 63,45 euros en efectivo procedentes del asalto que había perpetrado dos horas antes.
La sentencia también impone el pago de indemnizaciones a los dueños de los negocios que no renunciaron a percibirlas. En total, por este concepto, deberá repartir 1.075 euros entre los cuatro perjudicados.
La acusación pública, a la hora de fijar el año y cuatro meses de prisión por cada uno de los atracos, aplicó la atenuante de drogadicción al inculpado.
EL PERIPLO
Fernández Ucha reconoció que el 5 de octubre de 2012, poco antes de las diez de la noche, accedió a una tienda de golosinas de la calle Concordia e intimidó con un objeto punzante a la empleada para que le entregase los 80 euros de la caja registradora. Un día después entró en la zapatería Cuplé, en la calle Concordia, e intimidó con una navaja a la dueña, consiguiendo apoderarse de 250 euros.
En los dos siguientes días hizo lo propio en dos panaderías de la avenida de As Caldas. En 'Punto negro' se apoderó de 200 euros y en 'Sabucedo' consiguió 400. En ambos casos se valió de una navaja para exigir la entrega del dinero.
Antes de que fuera detenido e ingresase en prisión, aún atracó otro negocio el día 9 de ese mismo mes: una peluquería de la calle Faustino Santalices, donde empleó un cuchillo de cocina que le colocó a la altura de la cadera a la propietaria para robar los 225 euros que había en el negocio.
La Policía Nacional lo detuvo a las 21,50 horas de ese mismo día en la plaza de Covadonga. En su poder, tenía 63,45 euros en efectivo procedentes del asalto que había perpetrado dos horas antes.
La sentencia también impone el pago de indemnizaciones a los dueños de los negocios que no renunciaron a percibirlas. En total, por este concepto, deberá repartir 1.075 euros entre los cuatro perjudicados.
