Junto con la renovación del ferrocarril, la autovía A-76 es la infraestructura clave para reducir los tiempos de viaje entre la ciudad y Valdeorras. Sin embargo, su desarrollo todavía es incierto entre Ourense y O Barco. El Gobierno prioriza la construcción de los tramos entre la villa valdeorresa y Ponferrada, donde enlaza con la A-6. A partir de O Barco, la tramitación lleva años paralizada.
La tramitación de los diversos segmentos refleja esta realidad. De los tramos que comunicarían la capital provincial con la comarca oriental, tan solo uno tiene su proyecto en redacción: el de la circunvalación de Monforte. El resto están pendientes de su proyecto. Con polémica de por medio: diversos colectivos advirtieron sobre la afectación ambiental a la Ribeira Sacra por los tramos próximos a Os Peares.
Es más, sí se encuentra avanzada la tramitación de los tres tramos entre Valdeorras y El Bierzo. Requejo-Villamartín de la Abadía está pendiente de la licitación de sus obras, algo que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana prevé materializar este año. El presupuesto asciende a 126 millones de euros. El proyecto del tramo A Veiga de Cascallá-O Barco está finalizado pero debe volver a salir a información pública, y el tramo Requejo-A Veiga de Cascallá todavía se encuentra en redacción.
A partir de O Barco, la autovía es un papel guardado en un cajón. No se registraron avances en ninguno de esos tramos desde que se aprobó el estudio informativo en 2014.
Fue hace casi dos décadas cuando se prometió la construcción del vial, que debería jubilar la cada vez más obsoleta N-120. El viaje se reduciría a cerca de una hora.
