Un largo tramo de la autovía A-52 entre Vigo y Ourense lleva al menos dos meses con un carril cerrado y sin obras a la vista. Es medio kilómetro, poco antes del túnel de Folgoso, entre los ayuntamientos de As Neves y A Cañiza, y todo apunta a que no va a ser una reparación ni fácil ni rápida. Es más, a día de hoy, el corte no tiene fecha, por lo que la circulación continuará durante varios meses, sin precisar cuántos.
El alcalde de A Cañiza, Luis Piña, del PSOE, reconoce que está “muy preocupado” porque a día de hoy la actuación no está ni presupuestada ni contemplada siquiera. “Es una obra sine die, sin fecha”, reconoce el regidor cañicense. Al parecer, el problema se detectó en el paso de aguas por esa zona concreta, que tendría efectos sobre la calzada y el firme. Para reponer todo a su estado habría que realizar “una obra faraónica”, señala Luis Piña. Tanto que no hay presupuesto, y cuando se consigne tendrá que ser muy importante y con varios meses de trabajos.
En estas condiciones, pasará mucho tiempo antes de que la autovía cuente con todos sus carriles operativos en esta zona, una de las más transitadas, por cuanto se corresponde con el tramo entre Ponteareas y Cañiza, donde habitualmente hay mayor circulación de toda la A-52 al coincidir con entradas y salidas hacia otros destinos vinculados.
El regidor cañicense reconoció que no era en absoluto optimista con la reparación. Además, el proceso electoral juega a la contra, con los ministerios a la espera de acontecimientos. Haya o no cambio de Gobierno, pasará mucho tiempo antes de que el asunto sea tratado y presupuestado. “Es un problema con el agua y un mal drenaje que ahora se ha manifestado, sale agua a borbotones y no se puede utilizar el carril porque habría peligro”, añadió Piña. La autovía lleva en servicio entre Vigo y Ourense desde 1998, aunque no llegó a completarse en su tramo final.
Problemas de visibilidad
Además del carril cortado hay un problema con la visibilidad. Al no existir labores de mantenimiento de la autovía, todos los matorrales y plantas que hay en la mediana tienen tanta altura y envergadura que impiden la visibilidad en la conducción. Esto pone en peligro la vida de los conductores en sendos carriles en ambas direcciones.
