Las acusaciones de "coacciones" para impedir candidaturas enfrenta a PSOE y BNG, que critican el "caciquismo" existente, con el PP, que los acusa de protagonizar un "paupérrimo vodevil"
Optimismo, ambición y ganas de trabajar. Tres sensaciones que fluyen uniformemente entre las formaciones políticas de la provincia de cara a las municipales. Pero, sobre todo, la confirmación de que el PP ha sido el único partido capaz de formar lista en los 92 concellos de la provincia ha sido destacado por el propio partido, cuyo presidente provincial, Manuel Baltar, ensalzó la labor realizada por la formación para conseguir las candidaturas y replicó a las acusaciones de BNG y PSOE, que alertaban de supuestas "coacciones" para que no presentaran listas, de protagonizar un "paupérrimo vodevil".
Por partes. Conocidas ya las candidaturas, publicadas en el BOP, el secretario provincial del PSdeG, Raúl Fernández, comparecía a media mañana para achacar a la "despoboación do rural" la imposibilidad de presentar candidatura en Montederramo, Vilariño de Conso y A Pobra de Trives, una situación que los socialistas se han tomado con "insatisfacción por non ser quen de dar resposta a unha parte do noso electorado", que cifró en un 1,2% del conjunto de votantes ourensanos del PSdeG en 2011.
Pero el secretario provincial socialista atribuyó especialmente este hecho a la "dependencia absoluta do poder establecido" a la que está sometida la población que permanece en el rural ourensano, una situación en la que, dijo, "ten moitas veces que ver o PP, que goberna en moitos concellos, na Deputación, na Xunta e no Goberno central". Fernández, que apuntó que las dificultades de renovación afectan también a los populares, criticó la situación de "caciquismo crónico" que afecta a la provincia, "que imposibilita que os mellores vaian en cada Concello". Raúl Fernández explicó que otra de las razones se debe a la reducción del número de centros de enseñanza o de salud en el rural, que provocan la reducción de profesionales como profesores o médicos, "que nunca estiveron sometidos ás presións dos grupos políticos". En ese contexto, pidió la dimisión de Méndez Atanes, número 7 en la lista del PP de Verín, al frente del Consello Regulador, al considerarlo un medio de "presión" a los bodegueros de la zona. Sus palabras provocaron un airado comunicado del PP, que asume el presidente provincial del PP. Para Manuel Baltar, las acusaciones sólo ponen en evidencia "o estado caótico" de socialistas y nacionalistas, "incapaces de presentar candidaturas en tódolos concellos por lembrarse de que existen só en época electoral".
Para Baltar, la iniciativa de Xavier Vence, portavoz nacional del Bloque, de presentarse por Avión como protesta simbólica, no es sino "rirse da democracia", recordando que, cuando los nacionalistas de la formación frentista acusan al PP de "extorsión", olvidan, dice, que se cumplen 25 años "do episodio máis noxento da historia política de Galicia: a toma do Concello en Allariz por procedementos nada democráticos".
El BNG, que presenta 54 candidaturas, coincide en las críticas del PSOE a los populares, a los que ven "capaces de presentar 900 listas se fose preciso a través das institucións e empresas vinculadas ao PP", según el coordinador local en Ourense, Luís Seara. Desde el BNG acusan a la "rede clientelar" que impide que prosperen las listas ajenas a los populares, mientras "a masa crítica non está, porque os mozos marchan fóra".
Pese a esta reducción en el número de listas, Seara manifestó que el objetivo de los nacionalistas es "incrementar sensiblemente os resultados acadados hai catro anos", una meta que se sustenta en la percepción de la "recuperación da conexión coa poboación que se ve agredida polas políticas do PP".
Nuevamente el PP, a través del secretario provincial, Rosendo Fernández, lamentó que tanto PSdeG como BNG "fagan xustificacións de mal pagador por que non fosen capaces de facer lista en todos os concellos". Por ello, decir "que veñan a estas alturas, despois de contendas electorais, dicindo que non forman candidaturas por medo a represalias nosas é peregrino e está fóra de lugar", lamentó, pidiendo a los demás grupos que reconozcan "que non son quen de xerar a suficiente confianza para configurar unha lista electoral".
Frente a las "excusas", desde el PP dicen sentirse preparados "para ir a por todas" en la totalidad de municipios de la provincia, "e os cidadáns terán liberdade para votar a quen lle mereza a súa confianza", defendió Fernández. "O obxectivo sempre ten que ser máximo para un partido que voltou a amosar a fortaleza e o arraigo que ten na sociedade ourensá", afirmó.
LOS MINORITARIOS
Al margen del conflicto, formaciones como Anova o Compromiso por Galicia, que se estrenan en estas municipales, también se han mostrado optimistas. "Traballaremos para manter a Alcaldía de Manzaneda e, a partir de aí, seguir medrando", dijo el portavoz de Anova, Daniel Conde, mientras el coordinador provincial de CxG, Xosé Manuel Pérez Bouza, defendió las posibilidades de su partido de "entrar e incluso gobernar nos nove concellos onde nos presentamos". En cuanto a las "mareas", Miguel Doval, candidato de Ourense en Común, señaló que, por delante de aspiraciones numéricas, "o importante é poñer o Concello á disposición da cidadanía".
