Galicia estuvo ayer bajo la influencia de dos sistemas frontales muy próximos: uno que salía -la borrasca 'Ruth'- y otro nuevo que entra - 'Stephanie'. El primero dejó precipitaciones y barrió la Península Ibérica de oeste a este y desplazándose por su franja central hacia el Mediterráneo.
El segundo sistema frontal, que llegó posteriormente, muy cercano y también hacia de oeste a este, se situará a últimas horas de ayer sobre Galicia y estará a primera hora del lunes sobre el Golfo de Vizcaya. Esta bomba meteorológica o ciclogénesis explosiva (se formó en menos de 24 horas) dejó precipitaciones abundantes y vientos muy fuertes, especialmente en el litoral, que persistirán hoy por la mañana.
Toda la costa y el interior de Galicia estuvieron en alerta naranja desde la medianoche y hasta las 3 de esta madrugada pasada por vientos fuertes que podían alcanzar los 100 kilómetros por hora. A partir de las 3 de la madrugada y hasta las seis el nivel de alerta fue amarillo en tierra por ráfagas de vientos que oscilaron entre los 70 y los 80 kilómetros por hora, según la predicción de MeteoGalicia.
La situación tenderá a remitir durante las primeras horas de mañana martes, con el debilitamiento y alejamiento de la borrasca hacia el interior de Europa, si bien nuevos frentes atlánticos se irán formando en los días siguientes.n
