Las propiedades de las aguas mineromedicinales del los balnearios deben ponerse en valor para utilizarlas como elementos terapéuticos y de rehabilitación, según abogó un grupo de expertos, en su mayoría médicos hidrólogos, durante la sexta edición del Encuentro Internacional sobre Agua y Termalismo, actividad paralela a Termatalia. La mayoría de ponentes insistió en esta idea para superar el excesivo carácter lúdico con el que se relaciona en la actualidad a los centros termales.
Las características químicas de las aguas mineromedicinales y su forma de aplicación (temperatura y presión) son un recurso que puede mejorar la salud de enfermos crónicos, con problemas reumáticos o dermatológicos, potenciando un mayor grado de capacidad funcional, explicaron los expertos. El uso sanitario de los balnearios también podría reducir costes a la Seguridad Social, según sostuvieron los ponentes de estas jornadas, porque conllevaría una reducción del consumo de fármacos y fomentaría la medicina preventiva. Por ello, los médicos hidrólogos, provenientes de distintos puntos de España e Italia, insistieron en la necesidad de potenciar la prescripción de la hidroterapia como alternativa terapéutica.
En la inauguración de las jornadas estuvieron presentes el presidente de la Real Academia de Medicina e Cirurxía de Galicia, José Carro, el decano de la facultad de Medicina de la USC o el edil de Termalismo, José Ángel Vázquez Barquero, entre otros. Este último, reivindicó el termalismo como motor de desarrollo económico de las zonas rurales en las que existan manantiales de aguas mineromedicinales.
En la inauguración de las jornadas estuvieron presentes el presidente de la Real Academia de Medicina e Cirurxía de Galicia, José Carro, el decano de la facultad de Medicina de la USC o el edil de Termalismo, José Ángel Vázquez Barquero, entre otros. Este último, reivindicó el termalismo como motor de desarrollo económico de las zonas rurales en las que existan manantiales de aguas mineromedicinales.
