Pese a que el inculpado no recuerda ya lo sucedido en la mañana del 27 de marzo de este mismo año, para la representante del ministerio fiscal no cabe ninguna duda que Jonathan Carballo Quintas, de 25 años, es la persona que entró a una tienda de comestibles de la ciudad con un cuchillo en la mano para exigir a la propietaria del establecimiento el dinero de la caja bajo amenazas de muerte. Un propósito que no consiguió, según dijo la fiscal, porque la víctima consiguió salir a la calle a pedir auxilio.
El inculpado, quien según dijo era consumidor habitual de drogas en ese momento, no recuerda lo qué hizo ese día, si bien la acusación le recordó que en fase de instrucción sí había reconocido su participación.
Los hechos enjuiciados ayer en el Penal 2 ocurrieron en un negocio emplazado en la calle José Antonio Moretón. Los gritos de auxilio de la víctima ahuyentaron al ladrón, ataviado con una pasamontañas, quien fue perseguido por un testigo que pasaba por la calle y posteriormente por la Policía Local, que lo detuvo a la altura del Puente Ribeiriño.
La fiscal reclamó un pena de tres años por robo intentado.
Los hechos enjuiciados ayer en el Penal 2 ocurrieron en un negocio emplazado en la calle José Antonio Moretón. Los gritos de auxilio de la víctima ahuyentaron al ladrón, ataviado con una pasamontañas, quien fue perseguido por un testigo que pasaba por la calle y posteriormente por la Policía Local, que lo detuvo a la altura del Puente Ribeiriño.
La fiscal reclamó un pena de tres años por robo intentado.
