El incendio forestal de Laza que, tras unirse con el fuego de Chandrexa de Queixa, sumó 2.100 hectáreas quemadas, se mantiene activo. Sin embargo, la Consellería de Medio Rural informó ayer de que está “prácticamente perimetrado” y de que evoluciona “favorablemente”. También está activo, desde las 16,50 horas de ayer, un fuego en A Gudiña, que a las 19,30 horas había arrasado 20 hectáreas.
En total, seis fuegos permanecen sin extinguir en la provincia, pero ninguno experimentó cambios en cuanto a la superficie afectada. Los de Laza y A Gudiña son los únicos que siguen activos, después de que a las 20,50 horas del viernes diesen por estabilizado el registrado en O Irixo y por controlado el de Boborás. También permanecen controlados los incendios iniciados en Vilardá, en San Xoán de Río, que ha quemado 20 hectáreas; y en Casaio, en Carballeda de Valdeorras, que ha quemado 440.