Todavía en tratamiento y con el susto en el cuerpo, los dos jóvenes vigueses de 20 y 21 años que recibieron una brutal paliza en plena calle el pasado 30 de enero acudieron ayer a declarar ante el Juzgado de Instrucción 8, el mismo que envió a prisión provisional a uno de los presuntos agresores. Tras el interrogatorio, aseguraron a los medios que “aún estamos tocados psicológicamente, en recuperación” y, aunque prefirieron no hacer valoraciones sobre su testimonio, sí confirmaron que relataron en sala lo que recordaban de aquella noche.
El chico que sufrió las lesiones más graves, por diversos puñetazos y patadas en la cara, añadió que “no conocíamos de nada a los agresores” y que “no había motivo" para sufrir tal ataque.
Este joven todavía tiene muchas lagunas de memoria sobre aquel momento y su amigo recibió un primer golpe que le dejó inconsciente en el suelo, mientras continuaba una secuencia de hechos que fue captada en imágenes.
El relato que habrían aportado ante el juzgado ratificaría la primera versión ofrecida a la Policía en su momento. Aquella noche, los dos amigos se dirigían a una vivienda junto a otros dos compañeros. Se quedaron atrás porque fueron a comprar tabaco. Al llegar al portal se toparon con dos jóvenes que estaban orinando, al recriminarle su actitud estos respondieron de forma especialmente violenta, a golpes y patadas hasta el punto de mandarles a ambos al hospital.
Esta declaración se produce solo unos días después de que el juzgado decidiera levantar el secreto de actuaciones y archivar la causa por “haberse diluido los indicios” contra un primer detenido, un vigués de 32 años, que llegó a ingresar en prisión.
La Policía recibió nuevos testimonios e imágenes y acabó arrestando en Ourense a los presuntos responsables, dos futbolistas. Uno de ellos, Gustavo G., de 26 años, fue enviado a la cárcel investigado por un presunto delito de homicidio en grado de tentativa o lesiones agravadas con deformidad.
Declaraciones de los testigos e identificación
Tras el testimonio de las víctimas, el juzgado prevé tomar declaración al resto de testigos, ya que en el lugar donde se produjo la agresión había más personas. Junto a los amigos de las víctimas que llegaron a la zona, varios viandantes así como los vecinos que grabaron las imágenes. Uno de los presentes llegó a dirigirse al agresor en plena paliza. Los dos atacantes, una vez dejaron a los chicos en el suelo inconscientes se fueron del lugar. Según se aprecia en el vídeo que recoge los hechos, lo hicieron sin prisa al menos hasta girar la calle. Asimismo, todo apunta a que podría llevarse a cabo un proceso de reconocimiento e identificación de los presuntos agresores por parte de las víctimas.
Por su parte, los dos futbolistas investigados se han desvinculado de los hechos. Uno de ellos directamente lo negó y el otro mantiene que no se reconoce en las imágenes grabadas en vídeo y que suponen una de las principales pruebas de cargo al mostrar toda la secuencia de una de las palizas más graves ocurridas en zonas de ocio nocturno en Vigo.
