No son partidarios de legislar ‘en caliente’, a partir de casos dramáticos como el crimen de Laura

Magistrados, fiscales y abogados creen que las penas por delitos graves ya son bastante duras

La llegada del ex novio de Laura al Pazo de Xustiza se produjo entre fuertes medidas de seguridad. (Foto: Miguel Ángel)
Ante el debate de si es oportuno o no endurecer penas para evitar más crímenes, los protagonistas de la justicia consultados consideran que las penas ya contempladas para delitos como el homicidio o el asesinato son suficientemente severas. Fiscales, jue ces y abogados consultados entienden que el hecho de legislar debe ser connatural a un proceso de reflexión largo y siempre en frío, no a raíz de un suceso que sacude a la sociedad en un determinado momento.
Hechos trágicos como la muerte de Laura Alonso, devuelven al primer plano del debate las preguntas sobre la conveniencia o no de introducir cambios en el Código Penal que permitan disuadir a potenciales criminales, y den satisfacción a familias golpeadas por el drama del día que un ser querido les es arrebatado. ¿Hay que endurecer las penas para aquellos delitos de la gravedad de los homicidios, los asesinatos, las violaciones? ¿Se trata más bien de procurar que los condenados pasen en prisión todo el tiempo que estipulan las condenas? El Fiscal de Menores de Ourense José Manuel Ucha considera que ‘en determinados delitos, delitos de la máxima gravedad, el condenado tiende al cumplimiento íntegro de la condena que le fue impuesta’. El debate es muy complejo como para que a cualquier respuesta no haya que añadir matices. Ucha entiende que ‘siempre hay que tener en cuenta la evolución penitenciaria del delincuente’. No se puede perder de vista, en su opinión, lo que manda la Constitución española, que en el artículo 25 recoge que ‘las penas privativas de libertad y las medidas de seguridad estarán orientadas hacia la reeducación y reinserción social’. En este sentido, el fiscal señala que ‘si hay posibilidad de reinserción, si se acredita absolutamente que ha sido reeducado, y que no volverá a delinquir, también sería partidario de que pueda verse beneficiado por ello’.

En relación a la dureza de las penas, ‘el Código Penal ya castiga suficientemente los delitos graves’. Añade Ucha que, tal como ya ocurre en la jurisdicción de menores, podría ser interesante estudiar la aplicación en adultos del concepto de ‘libertad vigilada’, para casos en los que se verifica una idónea reeducación.

Fernando Alañón, presidente de la Audiencia Provincial, se pregunta si ‘de tener una mayor pena el delito de asesinato, o de existir el cumplimiento íntegro de las penas, cosa que ya existe según los casos, ¿se hubiese evitado el crimen de Laura Alonso? Probablemente no’. Entiende el magistrado que ‘no se puede legislar en caliente’. Por ello, y admitiendo que ‘el dolor de unos días como estos’ hace más comprensibles determinados planteamientos, no ‘me parece que el actual sea el mejor momento para plantear refor mas’ en el Código Penal.

Alañón se remite también a las penas enfocadas a la reeducación que establece la Constitución, al tiempo que considera ‘un tópico falso decir que se cumplen las penas mínimas en delitos graves. El asesinato está castigado con penas que pueden ir de 15 a 25 años, y si en el papel no parece mucho, el que está en la cárcel cumpliendo con la sentencia, está servido’.

Arturo González, decano del Colexio de Avogados de Ourense, se posiciona en una línea parecida, al subrayar que ‘desde el punto de vista de la política criminal, es un error legislar a golpe de noticia’. Personalmente ‘comprendo al entorno familiar, a los conocidos de la víctima cuando demandan más penas, más años en la cárcel para los culpables de delitos graves’. Pero ‘el debate legislativo no puede regirse por los mismas motivaciones que provocan el dolor’. La legislación española ‘es muy avanzada, y constituiría un error apostar por un endurecimiento de penas’.

El comisario de la Policía en Ourense, Ángel Barrera, argumenta que ‘las penas ya son duras’, y en todo caso, legislar es un acto lo suficientemente determinante como para ‘sopesarlo, medir y razonarlo en frío’.

Silencio para recordar a la joven

Los grupos políticos de la Corporación de Carballiño convocaron a las 12.00 horas de ayer una concentración en la Plaza Mayor. Autoridades, funcionarios y ciudadanos protagonizaron un emocionado minuto de silencio, roto con un fuerte aplauso y algún sollozo.

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