La secretaria xeral de Igualdade acudió al “Debate Popular' del PP

Marta González, contra la huella de la desigualdad

José Manuel Baltar, Marta González y María Antonia Rilo. (Foto: XESÚS FARIÑAS)
Una nueva edición del 'Debate Popular', organizado por el PP de Ourense, llevó hasta el Centro Cultural de la Diputación a la secretaria xeral de Igualdade, Marta González.
Ésta estuvo acompañada por el presidente del PP en la provincia, José Manuel Baltar, y la coordinadora de Igualdade e Formación, María Antonia Rilo. Con el título de 'Igualdade entre mulleres e homes, un obxectivo posible no século XXI', la responsable de igualdad de la Xunta de Galicia hizo un repaso de las 'dificultades' que encuentran también las mujeres de las sociedades contemporáneas para alcanzar la plena igualdad con los hombres. 'Para la supresión de determinadas costumbres sociales, es necesario mucho más que el cambio de las leyes ', señaló. Las razones de las desigualdades 'se deben a las resistencias de una cultura secular en la que las mujeres ejercieron siempre papeles secundarios, vinculados al mundo de la familia y del hogar'.

Las dificultades para vencer esa herencia milenaria -subrayó Marta González- son múltiples y aunque se avanza con rapidez, todavía quedan muchos vestigios de esa desigualdad. La plasmación de este conjunto de creencias en torno a las diferencias “biológicas” de hombres y mujeres 'han dado lugar a lo que se denomina división sexual del trabajo: las mujeres, en el entorno familiar, los hombres, en el ámbito público'.

La secretaria xeral evaluó el estado en el que se hallan actualmente las políticas de igualdad en Galicia. 'En este momento estamos intentando devolver a la coherencia a un área de gobierno en la que durante el bipartito las peleas entre PSdeG y BNG fueron constantes'.Teniendo en cuenta las necesidades de las mujeres -señaló- éstas 'precisan de políticas de conciliación porque la mayoría son madres, viven en pareja y trabajan'.

Marta González hizo referencia al sistema de cuotas para alcanzar la paridad aprobado por ley en 2007, para decir que si bien es 'un sistema polémico', ya que está en contra del principio de elección del mejor individuo, hombre o mujer, para un puesto concreto, 'ha conseguido avances en la participación de las mujeres en la vida política de los países donde se ha implantado'.

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