El Partido Popular se impuso con claridad en la provincia al situarse en torno a los 101.000 votos y 538 concejales (35 más que hace cuatro años), lo que significa el 49,4 por ciento. Con estos resultados, a pesar de haber perdido cuatro mil votos, los populares ganan un diputado en el Pazo Provincial al pasar de 14 a 15 escaños en la Diputación. Esto significa que José Luis Baltar tendrá todavía menos problemas para gobernar, aunque ya en Corporaciones anteriores disfrutó de esa cómoda mayoría, y acceder a lo que será su sexto periodo al frente de la institución provincial, a la que accedió en enero de 1990.
El PSdeG es segunda fuerza, con algo más de 58.000 sufragios, que le dan 222 ediles (25 menos que en 2007) y ocho diputados provinciales, los mismos que en el periodo recién finalizado, si bien con tres mil votos menos. El BNG es el claro perdedor, ya que le faltaron 13.000 votos con respecto a los comicios anteriores. Con ellos, se dejó también 38 concejales, quedándose en 112.
Especialmente importantes han sido para el PP los resultados obtenidos en las demarcaciones de Ourense y Verín; en la primera, porque dejándose algo menos de cinco mil votos y dos concejales en la ciudad, mantienen las ocho actas de diputados provinciales que ya había logrado en 2007. En esta circunscripción, la más importante de la provincia, pues aporta más de dos tercios de la Corporación (25), los socialistas ganan un escaño a costa del BNG, que de esta forma se quedará con dos diputados en el Pazo Provincial.
En Verín, el PP gana un diputado, que se lo quita a los socialistas, debido sobre todo a los malos resultados que estos obtuvieron en el municipio de Verín y en Vilardevós, donde han perdido una alcaldía histórica.
En Bande, los populares ganan cuatro concejales y mantienen el diputado provincial en juego. Tampoco hay cambios en Valdeorras, pues si bien el PP gana nueve concejales (son la aportación de la alcaldesa de Carballeda), el reparto de diputados permanece inalterable, con uno para los populares y otro para los socialistas.
En O Ribeiro, los populares se dejaron quinientos votos, debido a la menor participación, ya que pese al descenso, incrementan el porcentaje de apoyo, con el 49,2%, frente al 49,1% de hace cuatro años. A los socialistas les fue peor, ya que perdieron cinco concejales y también más de 800 votos. En porcentaje, su apoyo popular descendió más de 2,5 puntos en la comarca. Con todo, cada una de las formaciones aportará un representante a la Diputación.
En Carballiño tampoco ha habido alteración en el reparto de diputados, pese a que el PP ganó casi 1.200 votos en la comarca, que le dan ocho concejales más, y el PSdeG perdió esos mismos votos más o menos, y cinco ediles. En Trives, el único diputado en juego se lo queda el PP, que ya lo tenía, aún perdiendo dos ediles. En porcentaje aumenta en casi un punto el apoyo popular.
Especialmente importantes han sido para el PP los resultados obtenidos en las demarcaciones de Ourense y Verín; en la primera, porque dejándose algo menos de cinco mil votos y dos concejales en la ciudad, mantienen las ocho actas de diputados provinciales que ya había logrado en 2007. En esta circunscripción, la más importante de la provincia, pues aporta más de dos tercios de la Corporación (25), los socialistas ganan un escaño a costa del BNG, que de esta forma se quedará con dos diputados en el Pazo Provincial.
En Verín, el PP gana un diputado, que se lo quita a los socialistas, debido sobre todo a los malos resultados que estos obtuvieron en el municipio de Verín y en Vilardevós, donde han perdido una alcaldía histórica.
En Bande, los populares ganan cuatro concejales y mantienen el diputado provincial en juego. Tampoco hay cambios en Valdeorras, pues si bien el PP gana nueve concejales (son la aportación de la alcaldesa de Carballeda), el reparto de diputados permanece inalterable, con uno para los populares y otro para los socialistas.
En O Ribeiro, los populares se dejaron quinientos votos, debido a la menor participación, ya que pese al descenso, incrementan el porcentaje de apoyo, con el 49,2%, frente al 49,1% de hace cuatro años. A los socialistas les fue peor, ya que perdieron cinco concejales y también más de 800 votos. En porcentaje, su apoyo popular descendió más de 2,5 puntos en la comarca. Con todo, cada una de las formaciones aportará un representante a la Diputación.
En Carballiño tampoco ha habido alteración en el reparto de diputados, pese a que el PP ganó casi 1.200 votos en la comarca, que le dan ocho concejales más, y el PSdeG perdió esos mismos votos más o menos, y cinco ediles. En Trives, el único diputado en juego se lo queda el PP, que ya lo tenía, aún perdiendo dos ediles. En porcentaje aumenta en casi un punto el apoyo popular.
