El denunciado se acercó a la vivienda de Leiro en la que residía su expareja, hecho por el que fue sentado en el banquillo
David S.R. reconoció ayer que quebrantó en varias ocasiones la orden de alejamiento que tenía con respecto a su expareja, acercándose a a su domicilio y enviándole mensajes deWatsApp. Por estos hechos, aceptó nueve meses de prisión en el juicio celebrado ayer en el Penal 1.
Los hechos que lo sentaron en el banquillo de los acusados sucedieron el 17 de marzo de 2015 cuando se acercó a la vivienda de Leiro en la que residía la denunciante. En esta ocasión, se asomó por una ventana para mirar al interior. Asimismo, tanto en diciembre de 2014 como en marzo de 2015, le envió mensajes a través de WatsApp.
Por último, en la Navidad de 2014 se presentó en el domicilio en el que residía la víctima junto a su madre, en la calle Paseo de la ciudad. En esta ocasión, la portera del edificio le impidió el acceso al piso.
La fiscal reclamana en un primer momento 11 meses de prisión.
