La oposición busca una solución a los bolardos del casco antiguo

Casi seis meses después de que el Concello acordase en pleno modificar la ordenanza de tráfico para permitir que los residentes del Casco Vello pudiesen renovar la tarjeta magnética de acceso al barrio, la situación todavía no ha cambiado. Por ello, tanto BNG como PP urgen al gobierno municipal a que cumplan el acuerdo plenario y subsanen las molestias que sufren los vecinos.
Así, y aunque el Concello está dando a los residentes sin garaje (los que hasta el momento no pueden disponer de tarjeta) un permiso provisional de paso de vehículos, esta medida 'está a producir problemas no tráfico, atascos sobre todo, xa que o acceso se mantén paralizado mentras os traballadores de Tráfico comproban a validez deste permiso polo interfono', según asegura el concejal del PP José Luis Valcarce.

Mientras, el BNG, que fue el que propuso modificar la ordenanza de tráfico -también impulsada desde el BNG cuando cogobernaba con el PSOE-, subraya que 'a demora na implantación das novas tarxetas de acceso lévanos a considerar que o grupo de goberno só actúa con axilidade nas cuestións que lle convén', afirma Xosé Somoza. En este sentido, los nacionalistas enumeran varias de las propuestas que llevaron al pleno y fueron aprobadas pero que todavía no han sido cumplidas, como la apertura de la Casa da Mocidade o la atención psicológica para mayores en los centros cívicos, entre otras.

En esta apreciación coincide también el popular Valcarce, al señalar que 'estamos ante unha demostración máis da total inoperancia do grupo de goberno, que non ten capacidade de traballo nin de xestión, xa que só están preocupados polas súas disputas internas'.


EN TRAMITACIÓN

Por su parte, el grupo de gobierno sostiene que el acuerdo del pleno ha sido remitido a la Concejalía de Tráfico para que sean los técnicos de este departamento los que estudien cómo implementar las nuevas tarjetas. Desde el gobierno socialista se ha puntualizado en diversas ocasiones que no es que no cumplan las mociones, pero que hacerlo requiere tiempo debido a los trámites necesarios.

La actual ordenanza de tráfico vincula la expedición y renovación de las tarjetas al acceso a los garajes o negocios. El cambio pretende incluir como destinatarios a los residentes para que puedan acceder al barrio en coche, aunque estableciendo un tiempo de estacionamiento limitado por los técnicos.

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