Las Ejecutivas local, provincial, gallega y federal del PSOE han mantenido contactos a lo largo de este jueves para intentar buscar una salida a la crisis socialista en Ourense, mientras el grupo de cinco concejales díscolos de la ciudad se mantiene a la espera que sean los órganos del partido los que dictaminen una resolución que ponga fin al conflicto generado en las filas de la formación en la ciudad.
Fuentes consultadas por Europa Press de la Ejecutiva provincial y del grupo de díscolos, han indicado que los concejales socialistas Antonio Rodríguez Penín, Susana Bayo, Mónica Vázquez, María Devesa y Alfonso Rodríguez Vilachá, no van a hacer nada que esté fuera de los estatutos del partido y ellos mismos reconocen que los están siguiendo en todo momento.
En ese sentido, deberían asistir al pleno municipal del mes de enero, que será este viernes a las 9,00 horas, pues en todas sus declaraciones, ejecutivas y grupo discrepante aseguraron querer garantizar la gobernabilidad del Ayuntamiento de Ourense, tercera ciudad gallega, en la que fueron mayoría con un equipo de gobierno en el que estuvo el BNG y ahora, tras el cambio de alcalde por la dimisión de Francisco Rodríguez, imputado en el caso Pokemon, el PSOE tiene 11 ediles, y en la oposición están el PP con 11 también, el BNG con tres y Democracia Ourensana con 2.
El pleno del viernes tiene trascendencia en relación con la crisis porque su primer punto del orden del día será la puesta en conocimiento de los decretos del alcalde, Agustín Fernández, por los que despojó de sus competencias al edil Antonio Rodríguez Penín y los repartió entre Susana Bayo -las relativas a medio ambiente, que le eran propias pero dejó durante una baja por maternidad- y la teniente de alcalde Aurea Soto.
Además, el BNG lleva a debate su propuesta de pedir elecciones anticipadas precisamente originada por la crisis del grupo socialista.
Las fuentes consultadas indicaron que los teléfonos seguirán activos hasta última hora y hasta que comience el pleno del viernes por lo que todas las posibilidades siguen abiertas, tanto las relativas a que siga la división entre los ediles -visibilizada por primera vez en el pleno de diciembre- como a que haya algún acuerdo, que podría pasar por la restitución de las competencias arrebatadas a Rodríguez Penín, entre otros acuerdos ya planteados por el grupo de discrepantes y por la Ejecutiva provincial.
