Ourense, a la cola de España en vivienda pública

Los compradores de vivienda deben acudir al mercado libre ya que las administraciones, encargadas de promover equipamientos públicos, van al ralentí. Ourense es uno de los casos paradigmáticos: según datos oficiales del Gobierno, de las 471 viviendas vendidas en el primer trimestre de este año (últimas cifras auditadas) únicamente dos eran protegidas; es decir, el 0,4% del total, lo que coloca a la provincia con los peores datos de toda España. Pero, el mal es endémico. El pasado año se transmitieron en la provincia 2.042 viviendas, pero únicamente 39 eran de precio protegido, por lo tanto, el 1,9% del total. En pasados ejercicios la situación no había mejorado sustancialmente, aunque los porcentajes eran mejores. Por ejemplo, en el año 2008, el último del bum inmobiliario, se vendieron en la provincia 3.142 viviendas, de las que 228 eran protegidas, por lo tanto, un 7,2% de todas las operaciones formalizadas. Con estos indicadores, resulta complejo acercase al precepto constitucional del derecho a una vivienda digna. Cuando la vista del algunos partidos políticos se pone en regular el mercado libre, la propia administración está lejos de promover dotaciones de este tipo para las personas y familias con menos recursos. En el caso ourensano apenas se han desarrollado equipamientos en los últimos años y una de las situaciones más relevantes es la de la ciudad, por concentrar un tercio de la población de la provincia y la mayoría del parque de viviendas y las operaciones de compraventa. De las 191 transmitidas entre enero y marzo de este año, solo una era vivienda protegida. Los datos del año pasado tampoco son muy esperanzadores porque de las 820 comercializadas, once estaban bajo alguno de los regímenes de vivienda pública. Por lo tanto, solo el 1,3% del total. El plan de Urbanismo En el gobierno municipal ourensano son conscientes de esta situación y lo atribuyen a las dificultades de no contar con un planeamiento actualizado. Sonia Ogando, concejala de Urbanismo del Concello, concluye que “no hay polígonos gestionados para que la Xunta de Galicia pueda comprar solares o pueda hacer cesiones y así pueda hacer viviendas de promoción autonómica”. Incluso añade que la administración gallega “hizo lo que pudo en intervenciones como las viviendas construidas en el barrio de Covadonga”. Sonia Ogando cree que estos problemas no se producirían “con el plan urbanístico aprobado porque la Xunta podría encontrar ámbitos para comprar terrenos o incluso el concello podría ceder para viviendas públicas”. Su intención es seguir defendiendo “un porcentaje del 30% de vivienda de protección pública, a raíz de una petición formulada por unos cuantos constructores particulares de la ciudad”. Por lo que respecta al resto de la provincia, los datos oficiales del Gobierno demuestran que la puesta en el mercado de vivienda pública es irrelevante. En comarcas como las de Allariz-Maceda, Terra de Caldelas, Terra de Celanova o Viana en todo el año pasado no se entregó una sola vivienda protegida. Por el lado contrario, el concello más activo en este ámbito ha sido el de Carballiño, en cuyo casillero se anotan 10 equipamientos de este tipo durante el pasado ejercicio. Completan la relación una en la comarca de Baixa Limia y O Ribeiro, dos en A Limia y Terra de Trives, tres en Valdeorras y cinco en la comarca de Monterrei. La realidad municipal: un crisol de ideas para intentar retener o captar habitantes En el Concello de Verín no se plantean ceder suelo para la creación de vivienda pública. Algunos concellos de la comarca de Monterrei sí que cuentan con vivienda pública: Cualedro cuenta con cinco viviendas públicas en la antigua casa de los maestros, que alquilan por 50 euros. Vilardevós, a través de una subvención de la Xunta acondicionará el entorno de las antiguas viviendas de los maestros para vivienda pública. Allí ya hay tres que fueron rehabilitadas y están disponibles para ser habitadas. En Riós, también buscan crear una nueva vivienda pública en Castrelo de Cima, en la antigua casa-escuela. En Celanova hace años que no se promociona ninguna vivienda de protección oficial. El teniente alcalde, Javier Fernández Pulido, explica que a raíz de la crisis de la construcción, la promoción de obra nueva de edificios residenciales está parada, centrándose la actividad en viviendas unifamiliares en el entorno. Desde el gobierno local no está previsto liderar ningún proyecto de VPO. Según el registro único de demandantes del Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS), en Celanova hay tres solicitudes para optar a una vivienda de protección oficial de promoción pública en las modalidades de compra, alquiler y alquiler con opción a compra. El Concello de O Barco de Valdeorras analiza la posibilidad de construir vivienda pública a nivel municipal. Lo apuntó el alcalde, Alfredo García, quien comentó que “tenemos alguna idea para desarrollar a nivel municipal”. El regidor descartó rotundamente cualquier interés de otras administraciones por ejecutar proyectos de este tipo de viviendas en la villa. “No nos consta que la Xunta tenga intención de construir vivienda pública aquí. Nadie reclamó suelo”, comentó. En Xinzo de Limia, la alcaldesa Elvira Lama, explicó que las últimas viviendas construidas en la localidad fueron de “promoción privada” en A Devesa. También en la carretera de Baltar hay viviendas de promoción. “Actualmente no tenemos ningún proyecto en marcha. Demanda igual sí que habría, aunque los trámites para acceder a este tipo de inmuebles son complejos”, aseguró Lama. “De todas formas es algo que tenemos que estudiar porque terrenos sí que tenemos. Precisamente, en A Devesa tenemos una parcela de 4.000 metros que es del Concello”, señaló. En Allariz se centran más en la promoción de la rehabilitación y tampoco existe ningún plan de estas características. Sí lo hubo, tal y como recuerda la regidora, Cristina Cid, en el 2008 con el equipo de Gobierno de entonces “pero quedou en nada”. Las desigualdades, en cifras 471 Es el número de viviendas vendidas en la provincia entre enero y marzo de este año. Únicamente dos estaban regidas por algún sistema de promoción pública, un 0,4% del total. 2.042 Es la cifra de viviendas transmitidas en Ourense el pasado año, pero solo 39 eran protegidas, por lo tanto, un 1,9% del total. Durante los años anteriores el porcentaje ha sido similar. 10 Es el número de viviendas públicas puesta en el mercado en la comarca de Carballiño el pasado ejercicio, la que más equipamientos de estas características promovió en la provincia. 96% Es el porcentaje medio de venta de vivienda privada en la provincia, aquella que está regida por la oferta y la demanda. Algunas administraciones, caso del Concello de Ourense, pretende llegar al 30% de vivienda protegida.