En una de las operaciones se retiró dinero de la cuenta de un fallecido
Peritos contables constataron la existencia de "transferencias sospechosas" por parte de Manuel Rodríguez Varela, exsubdirector de una entidad del Banco Santander de Allariz, acusado de un delito continuado de falsedad en documento mercantil y apropiación indebida, a cuentas de familiares suyos, así como retiradas de dinero y cobro de reintegros irregulares que no aparecían después reflejados en la contabilidad bancaria.
Explicaron que durante una auditoría interna detectaron operaciones que no aparecían en la contabilidad, y que evidencian "discrepancias" entre la cantidad que se mostraba al cliente con la que aparecía reflejada en el banco. En dicha auditoría, que iniciaron a raíz de la reclamación de varios clientes, hallaron "libretas de plazo fijo que estaban manipuladas", con firmas falsificadas, un hecho que les llevó a pensar que el acusado había falsificado las firmas para poder apropiarse del dinero de sus clientes. Así, en una de estas operaciones identificaron una retirada de dinero de una cuenta firmada por un cliente "que ya había fallecido" y cuyo dinero habría sido traspasado a cuentas de algún familiar del acusado. "Muchas de estas operaciones no tenían justificantes y otras eran realizadas con firmas parecidas a las de los clientes",aclaró a preguntas de las acusaciones, los cuales identificaron "apuntes manipulados y dudosos".
En la misma línea, un perito calígrafo corroboró que las firmas estampadas en varios recibís correspondían con la firma del propio acusado.
Concluidas las periciales, ministerio fiscal y acusación particular se ratificaron en sus conclusiones en las que reclamaron para el acusado penas de cinco y seis años de prisión, respectivamente. En cuanto al quebranto para el banco, la fiscal lo cifró en 347.015 euros y el banco lo elevó a 875.533.
Por su parte, la defensa pide la libre absolución de Rodríguez Varela, ante la falta de pruebas concluyentes, que no determinan "ningún tipo de estafa", a excepción de "un reconocimiento de deuda" que procedió a devolver constituyendo por tanto dichos hechos "un tema civil y no penal".
