La reciente intervención en una de las zonas verdes de la rúa Ribeira Sacra, con 1.300 metros cuadrados de superficie, ha provocado división de opiniones. Desde el Concello precisan que le notificaron al Instituto Galego de Vivenda e Solo que esta finca estaba sin limpiar, por lo que el organismo autonómico es el responsable de la tala. El Gobierno local sostiene que los árboles son de la variedad ‘Ailanthus Altissima’, conocida como ‘Árbol de los dioses’, “una especie invasora sen valor ornamental nin paisaxístico”.
Desde la asociación vecinal de Portovello, su presidenta, Neli Padín, defiende la corta porque “había maleza y árboles muy torcidos y con peligro de caerse”. Pero desde la asociación ecologista Amigas das Árbores consideran que se eliminaron “18 árbores con ata 60 centímetros de diámetro, así como unha sebe verde, refuxio da fauna. E o máis difícil dunha cidade é consolidar as árbores”. Otra de las críticas responde a la numerosa cantidad de plásticos que quedaron en el lugar.
