La oposición confirma su rechazo al documento en la comisión previa al debate, aún sin fecha
Tal y como ya había anunciado cuando se cerró la puerta a vincular el presupuesto a una cuestión de confianza, el gobierno local, del PP, da los pasos para llevar las cuentas de 2018 al salón de plenos aun sin contar con los apoyos necesarios para que sean aprobados.
El alcalde ourensano, Jesús Vázquez, convocó ayer una comisión de pleno para dictaminar el presupuesto, un trámite imprescindible para que este pueda ser debatido en el salón noble de la casa consistorial.
En la sesión celebrada a primera hora de la mañana de ayer, los tres grupos de la oposición se reafirmaron en su posicionamiento y, al ser mayoría, impidieron el dictamen positivo al expediente, lo que adelanta, salvo un giro radical de los acontecimientos, la postura que adoptarán en el pleno, que todavía no tiene fecha para su celebración, indicaron fuentes municipales.
En la comisión, por su parte, también se procedió a tratar las enmiendas presentadas por PSOE y Ourense en Común al proyecto aprobado en junta de gobierno. En el caso de las socialistas, únicamente hay voluntad de aceptar las relacionadas con cambios en las bases de ejecución, mientras que la presentada por la marea fue rechazada de pleno.
