SOLIDARIDAD

La provincia se vuelca con la crisis humanitaria de Ecuador

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photo_camera Carlos Jiménez, Ramón Corral y Adelino Álvarez, junto al material que será enviado a Ecuador

Una iniciativa impulsada por el Obispado donará 20.000 kilos de material a las víctimas del terremoto.

Ourense ayudará a paliar las consecuencias del terrible terremoto que asoló Ecuador en abril. El proyecto, impulsado en la provincia por el Obispado y en el que colaboran las empresas de transporte urgente TDN y SEUR, además de La Región y la Diputación, permitirá enviar más de 20.000 kilos de material de ayuda a los damnificados del seísmo –que alcanzó los 8 grados en la escala de Richter,– en varias provincias costeras del país sudamericano. El desastre dejó 673 muertos, más de 12.000 heridos y daños millonarios. En los meses siguientes se produjeron más de 2.300 réplicas, que continuaron, dada su intensidad, provocando aún más desperfectos.

"La ayuda a las víctimas es necesaria, según el delegado diocesano de Misione"s, Adelino Álvarez, que logró conseguir más de 20.000 kilos de material, entre el que hay sillas de ruedas, medicinas, ropa de abrigo y prendas de vestir, sobre todo para niños; calzado, bicicletas, juguetes, productos de higiene y material escolar, sin el que muchos niños no podrían comenzar el curso escolar.

Adelino Álvarez Gayo recordaba ayer que la ayuda solidaria es "fundamental" para todos los damnificado, porque lo están pasando "muy mal". Muchos de ellos, además de perder a su familia, quedaron sin lo poco que tenían, incluida la vivienda.

Bajo el lema "Ourense-Ecuador, Unha ponte de solidariedade", el material fue cargado ayer en un camión que partirá en dirección a Albacete, cuya diócesis es la promotora original de la iniciativa.

"El proyecto nos pareció bueno en Ourense y decidimos sumarnos", apuntó el delegado diocesano de Misiones, que en la mañana de ayer se mostraba agradecido con las aportaciones realizadas.

El material fue recogido desde finales del pasado mes de noviembre en toda la provincia. Acumulado en 33 palés en las naves de la empresa TDN en el polígono de San Cibrao, Adelino Álvarez inspeccionó ayer la carga con el objetivo de que el material llegue en perfectas condiciones a su destino.

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