El Puente Nuevo ofreció ayer un aspecto insólito al permanecer cortado al tráfico durante la mayor parte de la jornada debido a las obras de aglomerado de las dos rotondas de acceso desde el barrio de A Ponte. Diecisiete carteles informaban a los conductores del cierre a la circulación de este punto, en la intersección de la avenida de Marín y la calle Vicente Risco.
Debido a la escasa a afluencia de vehículos los domingos por la mañana, los cortes no afectaron demasiado al tráfico de la ciudad, si bien despistaron a algunos conductores foráneos que no conocían los recorridos alternativos.