El nuevo plan de Urbanismo se llevará a pleno para su aprobación provisional este otoño, o al menos esa es la intención del alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, que lo hará sin negociar con la oposición pese a estar en minoría y sin intención de sacarlo a exposición pública. El equipo redactor del PXOM (Plan Xeral de Ordenación Municipal) tiene “prácticamente acabado” el documento tras incluir las “pequeñas modificaciones” que ordenó introducir el alcalde en junio de 2021, cambios que generaron desconfianza en el PP, que esta semana exigía conocer si están incluidos ya por el equipo redactor. Jácome tildó de “broma” la exigencia del PP de “más transparencia” y dijo que aunque el plan “no es santo de mi devoción” confiaba en llevarlo a aprobación provisional “este mismo otoño”.
Además, el regidor contra sus exsocios y los responsabilizó del “cambiazo” y de la “chapuza” del plan, aunque descarta ya redactar uno nuevo. Jácome prefiere “tirar adelante” y llevarlo a pleno sin exponerlo al público “porque los técnicos del Concello creen que no hay que exponerlo, aunque otros técnicos y abogados dicen que sí, pero me tengo que fiar de los del Concello. Si me engañan, tomaré medidas”.
En todo caso, Jácome es consciente de que no tiene visos de prosperar en pleno un PXOM con los cambios introducidos por él y sin negociar con la oposición, pero intentará que el resto de partidos queden como responsables. Desde el BNG, Luis Seara recuerda que lo primero que pidió su formación este mandato fue una segunda exposición pública del PXOM, y han solicitado en casi todas las juntas de área informes que justifiquen los cambios, “o que demostra a importancia que lle damos”. Creen que las palabras de Jácome son “unha fuxida cara adiante” tras “non facer nada” e ignorar la petición de reuniones. Seara recuerda que es una responsabilidad “compartida” entre PP y DO.
En el PSOE, la secretaria municipal, Natalia González, recuerda que exigieron “un millón de veces” convocar la comisión de seguimiento (lleva año y medio sin celebrarse) y que no les han facilitado ni informes técnicos ni del equipo redactor, “absolutamente nada”. Las últimas noticias, subraya González, “son do anterior mandato” y sostiene que el actual es un “documento Frankestein que non hai por onde collelo” y que requiere “consenso político”. Reduce las palabras de Jácome a “un anuncio electoralista”.
