Los ladrones sustrajeron 6.500 euros en metálico, dos relojes de la marca Rólex, un anillo de esmalte con diamantes, valorado en 4.500 euros, además de un collar de perlas con cierre de oro, y diversas pulseras y cadenas, también de oro, de una vivienda de Cambeo, en el municipio de Coles. Accedieron al interior del inmueble por una ventana y destrozaron la caja fuerte, ocasionando unos daños de 1.500 euros, según recoge la denuncia. La casa está dotada de sistema de alarma, pero fue inutilizada.
Un anillo de esmalte y diamantes, valorado en 4.500 euros; dos relojes Rólex, uno modelo president y otro Celini; un collar de perlas con cierre de oro; una pulsera de aro de oro macizo; un anillo de la marca Cartier; una alianza de oro y diversas pulseras y cadenas también de oro, además de 6.500 euros en metálico. Este es el botín que se llevaron los ladrones de una vivienda situada en una de las márgenes de la carretera N-525, a su paso por la localidad de Cambeo, en el muni cipio de Coles.
Los autores accedieron al inmueble entre las seis y media y las diez de la noche del sábado, forzando una ventana. Una vez en el interior, destrozaron la caja fuerte, en la que la dueña, Ana N.M., de 45 años, guardaba el dinero y la joyas.
La víctima declinó ayer hablar sobre el robo pero, según fuentes de la Guardia Civil, la vivienda está dotada de un sistema de alarma que, al parecer, fue inutilizado. La casa tiene una amplia zona verde, donde los dueños tienen perros para ahuyentar a los ladrones o extraños que intentaran acceder al interior, pero los animales no dieron la voz de alarma, lo que lleva a los agentes a sospechar que los ladrones les dieron de comer o los durmieron con algún sedante antes de acceder a la vivienda.
La Guardia Civil preguntó a los vecinos si se habían percatado de la presencia de algún coche o personas desconocidas merodeando por la zona, pero las pesquisas no dieron resultado. Los agentes también realizaron una inspección ocular en el inmueble para buscar huellas que le permitan detener a los autores.
Cuantiosos daños
La víctima, según recoge la denuncia, no supo precisar el valor del botín, pero para sustraerlo se ocasionaron 1.500 euros en daños en la verja, ventana, caja fuerte e interior de la vivienda, que dejaron toda revuelta. La Guardia Civil sospecha que los ladrones son auténticos profesionales y llevaban meses preparando el robo y conocían perfectamente los movimientos de la familia y los enseres de valor que guardaban en el domicilio. El material sustraído estaba asegurado.
Los autores accedieron al inmueble entre las seis y media y las diez de la noche del sábado, forzando una ventana. Una vez en el interior, destrozaron la caja fuerte, en la que la dueña, Ana N.M., de 45 años, guardaba el dinero y la joyas.
La víctima declinó ayer hablar sobre el robo pero, según fuentes de la Guardia Civil, la vivienda está dotada de un sistema de alarma que, al parecer, fue inutilizado. La casa tiene una amplia zona verde, donde los dueños tienen perros para ahuyentar a los ladrones o extraños que intentaran acceder al interior, pero los animales no dieron la voz de alarma, lo que lleva a los agentes a sospechar que los ladrones les dieron de comer o los durmieron con algún sedante antes de acceder a la vivienda.
La Guardia Civil preguntó a los vecinos si se habían percatado de la presencia de algún coche o personas desconocidas merodeando por la zona, pero las pesquisas no dieron resultado. Los agentes también realizaron una inspección ocular en el inmueble para buscar huellas que le permitan detener a los autores.
Cuantiosos daños
La víctima, según recoge la denuncia, no supo precisar el valor del botín, pero para sustraerlo se ocasionaron 1.500 euros en daños en la verja, ventana, caja fuerte e interior de la vivienda, que dejaron toda revuelta. La Guardia Civil sospecha que los ladrones son auténticos profesionales y llevaban meses preparando el robo y conocían perfectamente los movimientos de la familia y los enseres de valor que guardaban en el domicilio. El material sustraído estaba asegurado.
