Las obras de la N-525 entre los puntos kilométricos 233 y 234,7 -entre la salida sur de la A-52 y el hostal San Rosendo- están causando retenciones puntuales de tráfico. También se registran colas en la zona de obras de acceso al Carrefour.
La ejecución de las obras de la carretera N-525 Benavente-Santiago, a su paso por la ciudad (en concreto, entre puntos kilométricos 233 y 234,7) está provocando importantes retenciones de tráfico, al afectar a una zona muy transitada. En concreto, las obras se están ejecutando en la zona comprendida entre el acceso sur de la autovía A-52 y la gasolinera de O Piñeiral, un tramo de gran densidad de tráfico, tanto de entrada y salida de la A-52 como de circulación hacia el polígono comercial de Barreiros o al industrial de San Cibrao. Por ello, en horas punta se producen largas retenciones de vehículos, como ocurría ayer por la mañana, momento en el que el desarrollo de los trabajos exigió el corte de uno de los sentidos de la circulación y el paso alterno de los turismos, que fue regulado por los operarios. Las obras que se están ejecutando en la zona tienen como objetivo mejorar la seguridad vial, tanto por el elevado tráfico en este punto como por la existencia de algunas intersecciones de peligro, como los accesos a concesionarios y talleres ubicados en la margen izquierda (dirección Madrid-Ourense) o a O Piñeiral y Expourense en la margen derecha.
A estas obras se unen otras próximas, en el punto kilométrico 235 de la misma carretera (en O Fonsillón, frente a Maderas Soto), con el fin de mejorar los accesos al centro comercial Carrefour, que también suponen modificaciones del tráfico y retenciones puntuales.
A estas obras se unen otras próximas, en el punto kilométrico 235 de la misma carretera (en O Fonsillón, frente a Maderas Soto), con el fin de mejorar los accesos al centro comercial Carrefour, que también suponen modificaciones del tráfico y retenciones puntuales.
