La designación de Mercedes Valeiras como directora de la Casa da Xuventude (nombrada por el gobierno del PP) y los cambios introducidos en la gestión del recinto, sobre todo a la hora de solicitar salas para actividades, han llevado a un grupo a reunirse con el jefe territorial de la Consellería de Traballo e Benestar, José Selas, para manifestarles su descontento por la gestión de la actual regidora.
El pasado viernes acudieron a la Delegación de la Xunta encabezados por el actual presidente, Eladio Gómez (vinculado al PSOE), llevando con ellos una copia de los estatutos que durante 32 años rigieron el funcionamiento del ahora llamado Espazo Xove, pero que todavía no suponía una normativa al constituir tan sólo un acuerdo vinculante. Sin embargo, ello no fue obstáculo para que la Casa fuese, hasta ahora, un referente, recalca Gómez. Pero el fallecimiento de Benito Losada, director desde su fundación, dejó un vacío en el liderazgo del centro; y tras el cambio de gestión, 'preguntamos abiertamente a José Selas si tenía intención de seguir con el funcionamiento habitual', relata Gómez, a lo que 'no contestó ni sí, ni no'. Allí le dejaron los estatutos para que los estudie y le dé el visto bueno pero, por el momento, no han hablado de plazos. Desde la Delegación Territorial de la Xunta no perciben ningún problema en el funcionamiento del recinto juvenil y tan sólo confirman que los estatutos están siendo revisados. En el caso de que se consideren válidos, procederán a su aprobación sin mayor inconveniente.
La otra cara de la moneda, Mercedes Valeiras, se muestra sorprendida ante la celebración de la reunión con el jefe territorial, afirmando que 'conmigo no ha venido a hablar nadie'. Su procedencia como directora de un centro de menores también ha supuesto un punto incómodo para los socios, que entienden que es la 'antítesis' de la Casa da Xuventude. Ella, en cambio, no lo percibe como un problema y se reafirma en las 'ganas de trabajar' con las que llegó el pasado mes de julio.
A VUELTAS CON LA BUROCRACIA
El malestar entre los grupos que conforman la Casa también se ha expandido a raíz de los nuevos métodos de gestión adoptados por Valeiras. Entre ellos, destaca el nuevo procedimiento de solicitud de las salas, que ahora ha de hacerse por escrito. Para la actual directora, es 'lo más fácil' y reitera que 'se contesta en el momento'. Así, lo que Eladio Gómez entiende una 'burocratización brutal', para Mercedes Valeiras es 'normalizar el funcionamiento'. Los grupos de teatro también han mostrado su preocupación por las medidas, al haberles pedido a los mayores de 30 años que se desvinculen de la Casa, cuando 'los estatutos contemplan que el 20% de los socios pueden superar la edad máxima'. Una vez más, la directora se desmarca de las críticas afirmando que el recinto juvenil se encuentra en 'periodo de transición', aunque define el trabajo de Benito Losada como 'increíble'. Pero Eladio Gómez volverá a reunirse con los grupos que conforman el espacio esta semana para decidir las medidas a acometer ante la falta de plazos por parte del jefe territorial y pronto harán pública su decisión.
La otra cara de la moneda, Mercedes Valeiras, se muestra sorprendida ante la celebración de la reunión con el jefe territorial, afirmando que 'conmigo no ha venido a hablar nadie'. Su procedencia como directora de un centro de menores también ha supuesto un punto incómodo para los socios, que entienden que es la 'antítesis' de la Casa da Xuventude. Ella, en cambio, no lo percibe como un problema y se reafirma en las 'ganas de trabajar' con las que llegó el pasado mes de julio.
A VUELTAS CON LA BUROCRACIA
El malestar entre los grupos que conforman la Casa también se ha expandido a raíz de los nuevos métodos de gestión adoptados por Valeiras. Entre ellos, destaca el nuevo procedimiento de solicitud de las salas, que ahora ha de hacerse por escrito. Para la actual directora, es 'lo más fácil' y reitera que 'se contesta en el momento'. Así, lo que Eladio Gómez entiende una 'burocratización brutal', para Mercedes Valeiras es 'normalizar el funcionamiento'. Los grupos de teatro también han mostrado su preocupación por las medidas, al haberles pedido a los mayores de 30 años que se desvinculen de la Casa, cuando 'los estatutos contemplan que el 20% de los socios pueden superar la edad máxima'. Una vez más, la directora se desmarca de las críticas afirmando que el recinto juvenil se encuentra en 'periodo de transición', aunque define el trabajo de Benito Losada como 'increíble'. Pero Eladio Gómez volverá a reunirse con los grupos que conforman el espacio esta semana para decidir las medidas a acometer ante la falta de plazos por parte del jefe territorial y pronto harán pública su decisión.
