Un vecino de Torán (Taboadela) fue detenido como presunto autor de un intento de robo con violencia en una vivienda, que resultó ser la de un tío suyo. El arrestado entró en la casa en la madrugada del domingo con la cara tapada y una peluca. Ayer declaró en el Juzgado que no pretendía robar a su tío sino intimidarlo por hablar mal de él.
La Guardia Civil detuvo a un vecino de Torán (Taboadela) Antonio D.Q.C., de 34 años, como presunto autor de una tentativa de robo con violencia en el domicilio de un tío suyo, Antonio B.F., de 79 años, situado en la misma localidad.
El intento de robo se registró en la madrugada del pasado domingo cuando el arrestado, según fuentes de la Guardia Civil, se cubrió el rostro con una media y puso una peluca en la cabeza. Acto seguido forzó la puerta del domicilio de su tío y accedió al interior con la intención, presuntamente, de sustraer dinero y objetos de valor.
Su tío no obedeció a sus indicaciones referentes a la entrega de dinero y la plantó cara. Así, ambos hombres iniciaron un forcejeo, durante el que el presunto ladrón huyó de la vivienda.
El septuagenario denunció al día siguiente los hechos en el cuartel de Allariz y los agentes, tras inspeccionar el inmueble, procedieron a la detención de su sobrino, Antonio D.Q.C. que, según fuentes de la Guardia Civil, reconoció haber entrado en el domicilio de su tío pero no con la intención de robar, sino de meterle un buen susto y así intimidarlo para que dejara de hablar mal de él entre los vecinos.
El arrestado fue puesto ayer a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Ourense que, tras tomarle declaración, lo dejó en libertad con cargos.
El intento de robo se registró en la madrugada del pasado domingo cuando el arrestado, según fuentes de la Guardia Civil, se cubrió el rostro con una media y puso una peluca en la cabeza. Acto seguido forzó la puerta del domicilio de su tío y accedió al interior con la intención, presuntamente, de sustraer dinero y objetos de valor.
Su tío no obedeció a sus indicaciones referentes a la entrega de dinero y la plantó cara. Así, ambos hombres iniciaron un forcejeo, durante el que el presunto ladrón huyó de la vivienda.
El septuagenario denunció al día siguiente los hechos en el cuartel de Allariz y los agentes, tras inspeccionar el inmueble, procedieron a la detención de su sobrino, Antonio D.Q.C. que, según fuentes de la Guardia Civil, reconoció haber entrado en el domicilio de su tío pero no con la intención de robar, sino de meterle un buen susto y así intimidarlo para que dejara de hablar mal de él entre los vecinos.
El arrestado fue puesto ayer a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Ourense que, tras tomarle declaración, lo dejó en libertad con cargos.
