El verano dispara la preocupación en Ourense: el rural necesita casas para alquilar

Una vez rematada la primera semana de verano y de entrada en la nueva normalidad, y a las puertas de julio, los concellos del rural han empezado a recibir a personas con segunda residencia y turistas, y con el miedo a los rebrotes notan un alza de demanda de viviendas unifamiliares con terrenos, que se topan con un problema: la falta de disponibilidad de casas en alquiler. La provincia abandera la mayor tasa de viviendas vacías de todo el país, muchas de ellas en abandono, y ahora se topa con un problema que detectan en los municipios: tras la pandemia, se disparan las demandas de casas en los pueblos, sin poder atender con precisión las necesidades de la gente, procedente predominantemente de la ciudad. "Onte mesmo ata seis persoas estiveron preguntando, o problema é que non hai terreos. Esta pandemia fixo á xente replantexarse as cousas pero tamén vén a demostrarnos que algo non se estivo facendo ben no rural. Temos moitas casas vellas, sen rehabilitar, e así é imposible alugalas", explica el alcalde de Amoeiro (2.280 habitantes), José Luis González. En esa localidad, que dista 15 kilómetros de la ciudad, ya buscan fórmulas para "incentivar" que los vecinos den el paso de poner sus casas a disposición, ayudando a rehabilitar las viviendas, "pero para iso necesitaremos financiación, é o momento de que se mire desde outras instancias", dice José Luis González. “Nunha semana, alugamos catro" En Maceda (2.872), un poco más alejado de la ciudad, también están notando el bum de la demanda del alquiler. "Na última semana alugáronse catro chalés no concello, e vai aumentado o censo, pouco a pouco", explica Rubén Quintas, regidor macedao. Sí que aprecia, al igual que su homólogo amoeirés, que "hai moitas casas velliñas", lo cual supone un problema para el desarrollo y el aumento de vecinos, aunque insiste en la necesidad de ir "pouco a pouco". En Pereiro de Aguiar (6.275), también siguen notando la demanda, una "constante petición de información o de persoas que queren comprar ou alquilar casas, chalés ou fincas", crearon un apartado específico en una plataforma llamada MercaPereiro "para que se poidan anunciar todos os que teñan algo que vender e alugar e tamén os que queiran solicitar a información", señala el regidor, Luis Menor. Una idea semejante a la de Taboadela (1.429), y que coincide con la visión que ya dieron las inmobiliarias, sobre el auge de peticiones. "Queremos saber a ciencia cierta con qué parque de viviendas susceptibles de ponerse a la venta contamos, más que de vivienda nueva, inmuebles para rehabilitar. Hemos detectado un creciente interés por parcelas e inmuebles en nuestro concello", señala el alcalde, Álvaro Vila. El problema, en muchos casos, es que "os veciños non queren baixar o prezo, e outros non poden rehabilitar as casas", indica González, lo cual frena esta oportunidad con la que se están encontrando de aumentar la presencia de vecinos en el rural. Otro de los retos es conseguir "que se cense toda a xente que vive aquí, porque a metade dos que ten segundas residencias non se censa", dice el alcalde de Amoeiro, un problema que comparte Castro Caldelas (1.224). En la villa caldelá "temos moita máis xente residindo da que hai empadroada, xente que ten pisos na praia e na capital e polo motivo que sexa prefire estar censada alí", indica la alcaldesa, Sara Inés Vega. Aquí está llegando gente joven "que trae un plan de vida" y que sí se está censando para optar a ayudas de rehabilitación. Este notable incremento de demanda se nota también en A Peroxa (1.819), "xente que quere unha casa con piscina ou xente que xa está teletraballando e quere vivir no rural, supoñen un volume aínda baixo, dunhas 30 persoas", precisa Manuel Seoane, el regidor. Iniciativas en los concellos, que hacen la labor de “mediadores" Las iniciativas para dotar a los concellos de nuevas viviendas se están acelerando en los municipios. En A Peroxa, acaban de adjudicar la rehabilitación de dos casas para realizan en ellas cuatro viviendas, por cerca de medio millón de euros, que confían sirva de "impulso" para que la población interesado tenga espacios para vivir. En Cenlle (1.120), están embarcados en un proyecto d e construcción de seis viviendas de protección oficial. También en Quintela de Leirado (619), el alcalde confirmaba que "median" entre propietarios y futuros inquilinos ante el "repunte" que notaron en el interés en volver al rural. En Larouco (429), acaban de acondicionar las antiguas viviendas de los maestros para ponerlas en alquiler, ya que, según la alcaldesa, Patricia Lamela, "interésanos que veñan veciños". En Riós (1.516), tienen por objetivo empezar a adquirir viviendas y rehabilitarlas. "Notamos que se está empadronando más gente y se piden licencias de obra". Las cifras 248.362 - Viviendas construidas en la provincia de Ourense en 2020, según el Ministerio de Vivienda. 142.229 - Primeras viviendas que hay en la provincia. 106.133 - Viviendas no principales. 57.000 - Estimación de viviendas vacías en la provincia, que son a las que ahora quieren acceder los concellos. 42% - Porcentaje de segundas residencias/viviendas vacías sobre el total del parque inmobiliario.