Dos de cada mil mujeres ourensanas sufrieron violencia de manos de su pareja o expareja en un solo trimestre. Las denuncias por violencia de género se dispararon en la provincia de Ourense y alcanzaron cifras preocupantes entre abril y junio de 2022, cifras nunca vistas antes en un segundo trimestre del año. Las denuncias superan con creces ya a las que se daban antes de la pandemia y triplican a las recibidas hace una década.
Los juzgados ourensanos recibieron el segundo trimestre de este año (abril-junio) un total de 335 denuncias por violencia machista, un 16,3% más que en el mismo periodo de 2021 y un 81% más que en 2020. Es la cifra más alta de denuncias por violencia de género que han recibido los juzgados ourensanos en un segundo trimestre del año desde que el Consejo General del Poder Judicial ofrece datos en su Observatorio de Violencia de Género, activado en 2003 tras la puesta en marcha de la ley para la prevención de esta lacra social.
El incremento de denuncias (16,3%) respecto al segundo trimestre del año anterior es superior al incremento del 9,9% registrado en Galicia (1.813 denuncias) y también superior al acumulado en el conjunto de España, donde crecieron las denuncias un 12,33% (hasta 45.743).
Ourense tiene la ratio más alta de denuncias presentadas por habitante de todas las provincias gallegas y esta ratio también es superior a la media nacional. Los datos del CGPJ publicados ayer dibujan un panorama estremecedor. Los juzgados de Ourense recibieron 21,2 denuncias por cada 10.000 mujeres, frente a los 12,7 de A Coruña, 10,5 de Lugo y 11,6 de Pontevedra.
En el periodo analizado, solo 9 mujeres (de las 335 que interpusieron denuncia en Ourense) se negaron a declarar contra su agresor, una de las cifras más bajas también de los últimos años. En este caso, la cifra es más baja que el resto de provincias gallegas y que la media española. Este número de mujeres que se acogen a la dispensa para no declarar contra el agresor se encuentra en mínimos históricos. Por ejemplo, en 2017, con 224 denuncias presentadas en el segundo trimestre (111 menos que ahora), hasta 29 mujeres se negaron a declarar contra sus agresores, 20 más que ahora.
Perfil de las denuncias
De las 335 denuncias presentadas el segundo trimestre de 2022 en la provincia, un 75% de las víctimas eran mujeres de nacionalidad española y el 25 % de nacionalidad extranjera.
Más de la mitad de las agresiones denunciadas (57%) fueron cometidas por la expareja de la víctima, el 19% por la que era en ese momento su pareja, el 15,5% por el que era en ese momento su marido y otro 8,33% por el que era ya su excónyuge.
De los 87 varones enjuiciados durante ese mismo trimestre en la provincia, solo 12 resultaron absueltos, resultando así condenados el 86% de los que fueron a juicio.
Además, las mujeres ourensanas agredidas son las que más acuden al juzgado a presentar directamente la denuncia (9,6%) de toda España, sin ninguna otra provincia que alcance estos registros. Otro 70% de las denuncias las presentaron las víctimas directamente en la Policía y un 18,2% se produjeron tras intervención policial directa. Solo un 2,1% de las denuncias fueron presentadas por terceras personas.
La presidenta de Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del CGPJ, Ángeles Carmona, expresó su preocupación ante el aumento del número de víctimas, que se sitúan “en cifras más altas que antes de la irrupción del covid”, y alertó de que “la violencia de género se mantiene como un problema de primer orden”.
