El temporal cerró otras estaciones del norte y benefició a la ourensana
La estación de montaña Oca Nova Manzaneda recibió la segunda avalancha de visitantes del invierno. En esta ocasión, la borrasca benefició al "resort" gallego, pues impidió que el resto de las estaciones invernales del norte pudiesen abrir durante toda la jornada, derivando hacia Trives a numerosos aficionados al esquí. "Fue la única estación del Cantábrico que abrió todo el día", explicó el director general, Gustavo Samartín Vázquez.
La estación de montaña contabilizó 2.500 forfaits vendidos. Esta cifra, sumada a la de aquellas personas que se desplazaron únicamente para disfrutar con la nieve y el buen tiempo, elevó hasta los 6.000 el total de visitantes.
Este sábado no se reprodujeron los atascos del sábado 24 de enero, el primer fin de semana que Manzaneda recibió una avalancha humana. La estación de montaña calculó en 16.000 las personas que acudieron a la cita con la nieve durante ese fin de semana. Sin embargo, también hubo alguna que otra retención, esta vez provocada por los numerosos autobuses en el momento de maniobrar. En esta ocasión, los conductores de los turismos se esmeraron más al aparcar.
Los lugares de procedencia de los grupos más numerosos fueron Galicia y Portugal, si bien también llegaron de provincias como León. Sus esquiadores no pudieron hacer uso de las estaciones invernales existentes, al estar cerradas a causa de la borrasca.
También hubo problemas con la ventisca en Manzaneda. Aquí, el hielo rompió una roldana del telesilla Fontefría, lo que impidió ponerlo en marcha. Esta avería, sin embargo, en ningún momento impidió el acceso a las pistas de esquí.
