El torero José Ortega Cano dijo ayer al juez que cuando sufrió el accidente de tráfico en el que murió otro conductor no bebió alcohol y que solo se había mojado los labios con una copa de cava, al tiempo que aseguró que respetó todos los límites velocidad.
Ortega Cano compareció ayer como imputado dos horas ante el juez de instrucción número 9 de Sevilla, a quien afirmó que no excedió el límite de 90 kilómetros por hora de la carretera donde tuvo lugar el accidente y que controlaba su todoterreno, pese a que los peritos de la Guardia Civil afirman que colisionó a 125 kilómetros por hora tras invadir el carril contrario.
Sin embargo, en el momento de la colisión pudo darle 'un vahído' o 'somnolencia', que su abogado atribuyó a la arritmia cardíaca que sufre el torero. En contra del informe oficial que detectó en su sangre casi el triple de alcoholemia de la autorizada, el torero dijo primero que bebió un sorbo de cava y luego, a preguntas de otros abogados, que apenas se mojó los labios, por ello 'no se explica' los datos del Instituto Nacional de Toxicología.
Sin embargo, en el momento de la colisión pudo darle 'un vahído' o 'somnolencia', que su abogado atribuyó a la arritmia cardíaca que sufre el torero. En contra del informe oficial que detectó en su sangre casi el triple de alcoholemia de la autorizada, el torero dijo primero que bebió un sorbo de cava y luego, a preguntas de otros abogados, que apenas se mojó los labios, por ello 'no se explica' los datos del Instituto Nacional de Toxicología.
