El reverendo Benedict Groeschel, director de la Oficina de Desarrollo Espiritual de la Archidiócesis de Nueva York, se convirrtió en el protagonista de los últimos días tras sus polémicas declaraciones sobre los abusos sexuales de sacerdotes a menores. En una entrevista al National Catholic Register aseguró que los jóvenes de '14, 16 y 18 años son unos seductores' y que los curas en las situaciones de abuso sexual 'no buscan cometer un crimen' por lo que no deberían ir a la cárcel.
Representantes de la iglesia lamentaron sus declaraciones del sacerdote y recalcaron que Groeschel tuvo un accidente grave hace unos y que 'en los últimos meses su salud, memoria y su habilidad cognitiva le fallan'.
Ante el revuelo generado, y por la recomendación de sus superiores, el sacerdote optó por pedir disculpas en su página web.
Ante el revuelo generado, y por la recomendación de sus superiores, el sacerdote optó por pedir disculpas en su página web.
