Es la mayor oferta de empleo público de los últimos años y se hará en el curso 2019-2020
La Universidad de Vigo abrirá el próximo 1 de julio el plazo de presentación de solicitudes para los tres concursos públicos de plazas de profesorado que convoca para el curso 2019-2020, más de cien plazas que hacen de esta convocatoria la mayor de los últimos años.
"Son compromisos electorales claros en la apuesta por las personas, y medidas que revierten en parte los efectos que tuvo la crisis de los últimos años sobre el personal y la estructura de cuadro del Personal Docente e Investigador", destaca Manuel Ramos, vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado.
La propuesta de campaña del programa H2040, encabezada por el rector Manuel Reigosa, fue la de una dedicación docente máxima de 280 horas y la consolidación de los cuadros de personal.
Antes de final de año se ofertarán más de 50 plazas de titular, catedrático y doctor, siguiendo las prelaciones generadas a partir de la fecha de acreditación.
En total, esta acción supondrá una inversión de unos 985.000 euros entre los presupuestos de 2019 y 2020, detalla la Universidad de Vigo en su diario digital.
El concurso público de profesorado asociado oferta 43 plazas; el de profesorado ayudante doctor son trece plazas y otras ocho adicionales, las cuales se convocarán en el segundo cuatrimestre, y el concurso público para la elaboración de listas de espera oferta 40 plazas. A éstas hay que añadir, además, tres plazas de asociados de Ciencias de la Salud, así como las plazas de profesorado titular y catedráticos, que se convocarán antes de fin de año y que ascienden a 24 en el caso de los titulares, 24 de catedráticos y cinco de contratado doctor.
En un contexto en el que los ingresos se mantienen más o menos estables por el Plan de Financiación 2016-2020 “cualquier acción nueva de gobierno supone una reestructuración en el presupuesto para poder llevarla a cabo, claro está bajo la premisa de que la Universidad de Vigo siga manteniendo la estabilidad presupuestaria y cuentas completamente saneadas y solventes, como es el caso”, señala el vicerrector de Economía. Por su parte, el vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado incidió en que una dedicación docente “tan alta como era la de 320 tiene un efecto negativo, por una parte en la calidad de la docencia, ya que tener que asumir tal cantidad de horas supone disponer de menos tiempo para la preparación de las clases, y por otra parte, en la capacidad del profesorado para dedicarse a sus otras funciones: investigación, gestión y formación propia”, detalló Manuel Ramos.
