José Paradelo denunció que los integrantes de la plantilla de Robema le culparon del cierre de la cantera y que, días antes de la manifestación, ya recibió amenazas en la sede sindical
Dos extrabajadores de Robema (antigua Cavima), L.V.V. y G.S.M., fueron sancionados con sendas multas de 60 euros (10 días a razón de 6 euros diarios), por las faltas de amenazas de carácter leve e injurias y vejaciones injustas, que denunció el secretario de la intercomarcal Lemos-Valdeorras, de UGT, José Paradelo Arias.
Los hechos se remontan al 25 de noviembre de 2014, durante el corte de la carretera OU-0807, que comunica el pueblo de San Vicente (Vilamartín)con la capitalidad municipal. La movilización fue convocada por la plantilla de la cantera de pizarras Robema, cuya actividad paralizó la Dirección Xeral de Enerxía e Minas. A ese mismo lugar acudieron vecinos del pueblo y trabajadores de las otras pizarreras de la zona, estos acompañados por el repesentante sindical de UGT. Las diferencias entre ambos grupos obligó a los agentes de la Guardia Civil a colocarse entre ellos.
José Paradelo denunció que los integrantes de la plantilla de Robema le culparon del cierre de la cantera y que, días antes de la manifestación, ya recibió amenazas en la sede sindical.
El titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de O Barco falló que dos de los tres denunciados: L.V.V. y G.S.M., deberán abonar sendas multas de 60 euros, al quedar acreditadas sus amenazas de carácter leve e injurias, respectivamente.
En la sentencia, el tercer denuncia resulta absuelto, al estimar el juez que no quedó suficientemente acreditado que hubiese proferido amenazas o injurias contra el responsable en Lemos y Valdeorras de UGT: José Paradelo.
