Cristina Criado y Carmen García fundaron en el año 2016 VERBENA Madrid. Se trata de una marca de complementos – pendientes, diademas y bolsos – que gira en torno a la idea de piezas únicas e irrepetibles de naturaleza artesanal con acabados muy pulidos.
Actualmente la tecnología y la globalización apuntan hacia la desaparición de los oficios tradicionales y la misión de VERBENA es recuperar esas técnicas artesanales casi extintas para incorporarlas en productos con un diseño contemporáneo.
Carmen García afirma que el primer paso para la elaboración de cada una de las piezas es un profundo trabajo de investigación. A través de diferentes libros especializados e internet estas dos emprendedoras se empapan de folclores y otros elementos culturales de la geografía internacional para seleccionar varios de ellos e integrarlos en sus diseños.
Fue en el año 2019 cuando Cristina y Carmen descubrieron así Viana do Bolo y al boteiro, la figura representativa del Entroido del municipio. Tras viajar hasta allí para conocer de primera mano su vestimenta, entraron en contacto con tres vianesas que a lo largo de su vida han elaborado decenas de trajes, Otilia, Anita y Charo. “La acogida fue excepcional y a todas les encantó nuestro proyecto”, afirma Carmen. Las tres vianesas fueron las encargadas de fruncir los lazos que actualmente forman parte de lo que fue su primera colección de bolsos. “Ha sido un costoso proceso de elaboración ya que cada pieza es única, cada bolso tiene unas dimensiones y unas características distintas”, explica Carmen. Otilia, Anita y Charo estarán siempre presentes en VERBENA ya que las piezas llevan sus nombres, el de ellas y el de las madres y abuelas de las fundadoras de la marca. “Quisimos ponerles sus nombres y el de otras mujeres representativas para nosotras”, declara Carmen.
Las tres artesanas durante el proceso de creación.
Charo Porto, una de las artesanas vianesas, se muestra orgullosa al recordar el proceso. “Elas trouxéronnos as cintas para fruncir e as telas sobre as que tiñan que ir cosidas”, explica. Aunque el proceso es el mismo que el utilizado para la camisa de boteiro, en este caso se hizo todo a mano, “non utilizamos para nada a máquina de coser”, añade. Después de la primera parte del proceso los bolsos retornaron a Viana para llevar a cabo los remates finales. “Cando os vimos prácticamente rematados encantáronos. Son preciosos”, afirma. Además asegura que ha disfrutado mucho durante su realización.
Estas preciadas piezas continúan a la venta en la web y en varias tiendas de la marca y según afirman, han gustado mucho a sus clientas.
