Opinión

¿De verdad ya hay crédito?

Sin financiación no hay proyectos empresariales que se materialicen, y sin nuevas actividades económicas y consolidación de las empresas ya existentes, no se va a fomentar la nueva creación de empleo y mucho menos generarlo fijo y de calidad, que es lo que todos queremos y deseamos.
Y respondiendo a la pregunta que formulo como titular, diré que para unos fluye el crédito sin problema y para otros únicamente lo dan visualizado en la cartelería expuesta en las cristaleras de las entidades financieras. Me explico:

Según los últimos y contundentes informes del Banco de España, el 2014 concluyó con una caída del crédito por sexto año consecutivo, así de claro. Lo que pone en la más absoluta evidencia la credibilidad de esos consejos de dirección de algunos bancos que nos dicen que el crédito está totalmente reactivado y fluye sin problema en el circuito tradicional a empresas y familias. Y la pregunta es: ¿pero quienes disfrutan del crédito que nuestras rescatadas y saneadas entidades dicen que ya prestan fluidamente y sin problemas? Pues la respuesta nos la da nuevamente el Banco de España. El mejor cliente crediticio de los bancos son las administraciones públicas, registrando alzas mensuales de entre el 5,4 y el 10,6%. Sí, esas mismas administraciones que ya acumulan una deuda pública estratosférica, que ya supone más de un 96% del PIB, y que por supuesto vamos a pagar todos nosotros (y generaciones futuras) hasta el último céntimo de euro. Mientras tanto, empresas y familias estamos haciendo los deberes correctamente y esta afirmación la constatan de nuevo los datos del Banco de España, que nos muestra un descenso del saldo del crédito de las familias que lo situaría en 745.793 millones, lo cual representa una caída en la deuda privada de un 4,7% en la comparativa interanual. Por lo que la deuda de los hogares españoles vuelve a niveles de septiembre de 2006, previos al inicio de la crisis económica. Mientras, la deuda de las empresas también se redujo de la misma forma, tomando como referencia la comparativa en la tasa interanual, un 3,4% en 2014.
Queda claro, ¿no? A quien prestan los bancos y a quienes les siguen diciendo vuelva usted otro día o tráigame las escrituras de las propiedades de sus padres, suegros, abuelos, bisabuelos y todo lo que se tercie, para que ese sufrido autónomo o esa debilitada pyme puedan pedir prestado para intentar comprar esa maquinaria necesaria para seguir siendo competitivo o simplemente puedan acometer su proyecto empresarial.
Esta es la patética realidad, reflejada así en el último informe del supervisor, y que a día de hoy nos siguen ofreciendo nuestros bancos. Los mismos que siguen sin anular las cláusulas suelo de los créditos hipotecarios en vigor y eso que Bruselas les tiene dicho por activa y pasiva que es abusiva, y más al comprobar cómo el Euribor se mantiene en mínimos pero no repercute en las letras de miles de familias gallegas. Finalizo diciendo que a la banca, permisividad cero, y tomaduras de pelo, ni una más. El rescate de nuestro sistema financiero, pagado por toda la ciudadanía de este país, debe derivar ya, sin excusas ni medias verdades, en financiación inmediata a empresas y familias.

Te puede interesar