Opinión

El disfraz del Viejo Milenario

Un buen amigo, que no se cita porque no le agradaría, sugirió al Anciano que escribiese dejando hablar únicamente al corazón. Que expresase lo que constituye la esencia de una identidad tan compleja y singular como es la de aquellos que buscan infructuosamente la Verdad que hace libres a los hombres. Difícil tarea que no han resuelto los intelectuales, científicos y filósofos a lo largo de los siglos. A cualquier persona le es muy embarazoso mostrar su intimidad, sobre todo sin haber previamente pactado lo que le interesa al lector. En un mundo en el que la sociedad está preocupada por temas trascendentales que afectan a su futuro -las enfermedades, la invasión de Ucrania, la crisis energética, el cambio climático, los sangrientos movimientos migratorios, la situación económica, la pérdida de valores… por citar los más urgentes-, solo una ínfima minoría puede manifestar interés en oír las dudas existenciales de un travestido personaje. ¡A ellos me debo... pensó el moderno Ziusudra! 

El Viejo Milenario cree que la inspiración nace del deseo de perpetuar un momento de lucidez que forma parte de un proceso creativo único, que pocas veces estamos en condiciones de elaborar con la rigurosidad suficiente. Además, no se puede olvidar que a lo largo de la existencia todos han tenido experiencias contradictorias; frustraciones, derrotas, dolores, miedo y efímeros éxitos ¡Qué sencillo es el eludir lo trascendente cuando la muerte parece lejana! ¡Qué fácil es buscar el amparo de un Ser Superior de características antropomórficas que comprende las pasiones humanas y generosamente ofrece el perdón! Las escuelas eclécticas han tratado de conjugar los pensamientos más dispares y llegar a conclusiones que satisfagan las preguntas que más inquietan al ser humano. Pero ello supone el difícil reto de estar en permanente vigilia, ya que la duda es inherente a nuestra limitada capacidad de comprensión y cualquier instante de meditación reflexiva nos puede colocar a las puertas del racionalismo ideológico y embarcarnos en un nihilismo posmoderno que nos aísle de la energía cosmológica que nos une a una comunión con la Totalidad. Quizás sea más fácil integrarse en el grupo, seguir las directrices que identifican al colectivo, obedecer consignas sencillas y mostrarse sumiso en el dogma, sin que este límite excesivamente debilidades naturales. Sencillo es para el que tiene fe seguir los mandatos de los intermediarios del Ser Supremo. Sencillo lo es también para el ateo, convencido de la materialidad de la existencia y resignado a su temporalidad. Sin embargo, la causalidad antrópica ha determinado una vida inteligente en un universo sideral con el objetivo de perpetuarla en el espacio y en el tiempo, condicionando su existencia a la integración en el vacío inteligente consciente y eterno. 

El miedo atenaza el conocimiento del YO; se le teme y se le odia. Se busca la representación de un ego falso que muta su representación en un escenario donde el tramoyista se ríe de los actores que bailan desordenadamente a un ritmo que lleva a la nada. Fama, riquezas, poder, aderezadas por una elevada dosis de soberbia; en un contexto donde un ninot articulado por corporaciones y materiales convierte la deuda en carne humana, generando violencia y destrucción para alimentarse de los despojos de la miseria que crean la enfermedad, la pobreza, el hambre, la guerra y el fascismo.

El Viejo Milenario ha dejado que los dedos se muevan al dictado de su liberado cerebro hermanado con un corazón fatigado por impulsos incontrolados. No ha pretendido escribir para un lector ajeno a sí mismo; sí lo que ha reflejado libremente son los sentimientos de quien habiendo vivido cree que un instante de felicidad nace de cada momento de amor. El Anciano, generoso con quien abona sus cebollas, recuerda a Vikctor E. Frankl creador de la logoterapia cuando afirma que el hombre no está solo dominado por el inconsciente pulsional como afirma Freud o un inconsciente psíquico como defiende Jung. Es Adler quien defiende que antes del poder la humanidad busca el significado.

Te puede interesar