Opinión

La clase de religión

(JOSÉ PAZ)
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Hace un tiempo que el hoy arzobispo primado emérito de Tarragona invitaba a los padres a reivindicar el derecho a la enseñanza religiosa y recordaba, mons. Jaume Pujol, algo preocupante: “Hay colegios que no quieren de ninguna manera que allí se dé clase de Religión”. Y, por otra parte, aludía al tema Lluc Torcal, prior de Poblet: “Vienen estudiantes que preguntan ¿quién es aquel señor colgado de la cruz?”. La Junta de Extremadura aseguró que su currículum de Religión “atiende a los acuerdos Iglesia-Estado”. Sigue siendo la clase de religión uno de los principales escollos para alcanzar el ansiado pacto educativo que permanezca más allá del partido que gobierne. 

Hoy en día cualquier persona, cuando ve que no se atienden sus derechos, lógicamente protesta a vemos cantidad de denuncias; y por las cosas más importantes como es la educación de tu hijo, ¿protestan los padres? Jaume Pujol planteaba en un vídeo junto a otros líderes religiosos la necesidad de defender la libertad religiosa. En el vídeo, el primado relataba cómo se dan casos en los que el director elude dar clase de Religión y dice: “No le apunte a clase de Religión que no hay nadie”. Si esto lo dice a los diez que han venido antes a apuntarse a clase de Religión, evidentemente esta persona está actuando de mala fe. “Esto es una escuela pública, laica y aquí no hacemos clase de Religión”, son algunas de las respuestas que se escuchan.

La Religión es una asignatura más, con una estructura y un currículum al igual que el resto de materias de Infantil, Primaria y Secundaria, aunque quizá se pueda mejorar. En todo caso a nadie se obliga en esta clase a ir a misa cada domingo. Algunos apenas saben algo de la cultura religiosa tradicional.

Por su parte, el abad de Montserrat, Josep María Soler, sostiene que “para hacer una buena educación, la dimensión de la religión cristiana, y vinculada a la Iglesia católica, ha de tener una importancia especial”. Afirma: “No son lo mismo las religiones del Extremo Oriente que la que de alguna manera ha forjado Occidente y está en las raíces de nuestro pueblo”. Para el filósofo y teólogo Francesc Torralba, el laicismo ve la religión como “un obstáculo al progreso, al desarrollo científico, una fuente de discriminación, de problemas sociales, de conflictos, de guerras”.

Para defender la clase de Religión, los autores del vídeo también citan el Estatuto de Autonomía de Cataluña que en su artículo 21.2 señala que las madres y los padres tienen garantizado el derecho a que sus hijos “reciban la formación religiosa y moral conforme a sus convicciones en las escuelas de titularidad pública”.

Además, el acuerdo sobre enseñanza firmado en 1979 entre el Estado español y la Santa Sede establece que la enseñanza de la Religión debe incluirse en “los planes educativos en los niveles de Educación Preescolar, de Educación General Básica y de Bachillerato y Grados de Formación Profesional” y precisa que aunque no tendrá carácter obligatorio para los alumnos, sí deberá garantizarse el derecho a recibirla. 

Ahora el Supremo reconoce los sexenios de los profesores de Religión. Y vuelve la clase al Bachillerato. Es muy lamentable que los planes de la asignatura estén cambiando continuamente según el color del partido en el Gobierno. Un juego que debiera desaparecer por bien de los alumnos.

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