Dice Alberto Núñez que el primer alto cargo que va a caer por decreto si es que gobierna será Félix Tezanos, el polémico y atrabiliario presidente del Centro de Investigaciones Sociológicas que ha puesto de moda una nueva manera de hacer encuestas. Lo primero que tiene que hacer Feijoo si quiere cepillarse al catedrático emérito es, por tanto, ganar las elecciones. Pero si esta primera premisa se cumple, no le vendría mal al país que cumpliera su promesa y cesara sin contemplaciones a este caballero que en su celo y en su deseo suicida de servir a su señorito no ha tenido menor inconveniente en engañarlo a él además de engañarnos a todos. Tezanos ha convertido una agencia gubernamental otrora seria y rigurosa en uno de los actos más regocijantes de “La Venganza de don Mendo” –“Sabed señora que a más de una hora, las siete y media es un juego. Y un juego vil y traidor que o te pasas o no llegas. Y el no llegar da dolor porque indica que mal tasas y eres del otro deudor. Más ¡ay de ti si te pasas! Si te pasas es peor”
Tezanos ha convertido una agencia gubernamental otrora seria y rigurosa en uno de los actos más regocijantes de “La Venganza de don Mendo”...
En resumen, ha llevado al límite su dedicación a la figura del líder aun a costa de triturar el prestigio adquirido por la institución a lo largo de los años. A cambio, este celo enfermizo por ofrecer a su presidente los mejores augurios, darle cariño y refugio y procurar tenerlo contento, no ha hecho otra cosa que desviarlo de la realidad a base de contarle una mentira tras otra que, probablemente, ha impedido al presidente tomar las decisiones precisas para remediar estados desfavorables. El desajuste permanente entre las predicciones de Tezanos y su equipo y el resto de los estudios firmados en otras latitudes aparecía meridiano en cada consulta electoral, pero el catedrático santanderino ha seguido manteniéndose en esta posición hasta el desaguisado final. La distancia era tan manifiesta entre lo que el CIS anunciaba para las elecciones autonómicas y municipales y los resultados que se produjeron en los colegios electorales que con eso hubiera bastado para que el propio Sánchez lo hubiera fulminado.
El desajuste permanente entre las predicciones de Tezanos y su equipo y el resto de los estudios firmados en otras latitudes aparecía meridiano en cada consulta electoral, pero el catedrático santanderino ha seguido manteniéndose en esta posición hasta el desaguisado final
Ahora no basta con apartarle del cargo si la situación cambia. Sería conveniente exigir responsabilidades porque este engaño permanente y cada vez más incalificable se ha llevado a cabo con dinero público lo que implica la necesaria petición de explicaciones. No todo vale.
