La falta de camareros ahoga a la hostelería de la comarca de Valdeorras

Carteles que anuncian “Se busca camarero. Razón aquí” se repiten una y otra vez en bares, cafeterías y restaurantes de toda la comarca de Valdeorras. Da igual dónde se mire: en el Malecón de O Barco, en las zonas más céntricas, en los barrios periféricos o en localidades como A Rúa, el mensaje es el mismo. La hostelería necesita manos, y no las encuentra.

Este fenómeno no es exclusivo de la comarca. La realidad es clara, pero los hosteleros afirman: hay trabajo, pero faltan ganas, compromiso y actitud.

En O Malecón, Jorge Fernández y Miriam Couceiro lo viven en primera persona. Son los responsables de Bohemio Cafetería. Cuatro personas y ocho manos, pero que no son suficientes ante una terraza llena que únicamente se vacía a lo largo del día para dar cobijo a nuevos clientes buscando un refrigerio en las tardes calurosas del verano. Ellos explican que mantener ese ritmo sin el personal adecuado es una tarea difícil.

“Tenemos muchos currículums, pero la gente no tiene actitud”, lamenta Jorge. “A nadie le gusta quedarse al cierre, y todos quieren irse a su hora aunque vean que el bar está completamente lleno. Si se tienen que quedar más, por ejemplo, nosotros lo compensamos siempre, sea con dinero o con descanso. Pero aún así, cuesta encontrar a alguien con humanidad, con ganas de trabajar en equipo”, explica.

La pareja lleva tiempo buscando personal, pero asegura que no se trata sólo de experiencia. Lo que valoran es algo más intangible, pero esencial en la hostelería: la humanidad. “Buscamos humanidad y actitud, y hoy en día eso falta”, resume Jorge, añade además que comprende el lado del camarero ante actitudes de los clientes. “Algunos se piensan que por venir aquí tenemos que ser sus amos, y eso no es así tampoco y entiendo que eso queme” detalla. La hostelería valdeorresa continúa, otro verano más, sin camareros.

Carlos Terán, presidente de la Asociación de Empresarios de Valdeorras (AEVA) explicó que es una preocupación grande para el sector, ya que viene de años anteriores. “Nos vamos a reunir en breve con el sector. Estamos hablando de camareros, cocineros y demás. La gente no quiere formarse, no quieren la hostelería y es una preocupación esa falta de personal, es una preocupación del día a día”.

Un local al 50 por ciento y sin camareros

Manuel Martínez Anta es el gerente de El Muro del Malecón. En 2020 comenzó su proyecto particular en un local situado en pleno Malecón de O Barco. Un par de años después decidió comprar el local aledaño, cerrado desde hace décadas, reformarlo y ampliar su negocio. Actualmente esa parte se encuentra cerrada ante la falta de camareros y también porque es una zona menos práctica para trabajar durante el periodo estival. Destaca que la gente cada vez prefiere otros trabajos antes que la hostelería. “Muchos no quieren ni preguntar, pero también estamos pagando que muchos empresarios y autónomos no dan el salario mínimo por convenio. También porque quieren disfrutar de sus amigos o de tiempo libre y optan por otras profesiones”. Respecto al cierre parcial de su local destaca que en parte sí es por la falta de camareros. “Aunque el principal motivo es porque la gente en verano opta más por la terraza. Así que nos es más práctico tener a los camareros en una barra y en la terraza”. A su vez confirma que recibe muchos currículums para trabajar, explicando que el 90% son de personas de fuera. De cara al futuro, aunque las tecnologías avanzan, es rotundo: “Puede agilizar el trabajo, pero la gente quiere la cercanía del camarero”.