Vecinos del Ayuntamiento de Lobios muestran su preocupación por el estado de abandono en el que se encuentra el embarcadero de Aceredo, construido junto al puente que comunica el término municipal con el vecino de Entrimo, en aguas del embalse de Lindoso. 'Existe una desidia total por parte de los responsables municipales, del Parque Natural y de la Xunta', acusa Francisco Villalonga, vecino de la parroquia de Compostela y usuario del embarcadero que lamenta como en tres años 'no han sido capaces de inaugurarlo. Bien explotado, este embarcadero sería un atractivo importante, no sólo para Lobios, sino para toda la comarca'.
La infraestructura de titularidad municipal, la segunda de sus características en el ayuntamiento, fue construida por el gobierno bipartito presidido por el socialista José Lamela. Desde el Concello, la actual regidora del PP, María del Carmen Yáñez, explica que 'el problema está en su ubicación, que no es la más idónea al verse afectada por las variaciones del caudal del embalse'. Según la alcaldesa 'no podemos garantizar un nivel constante de agua' lo que hace inviable por el momento su explotación.
Yáñez considera que este problema debería haberse planteado antes de la construcción y no ahora. Sin embargo asegura que tratará de negociar con la empresa explotadora del embalse (la portuguesa EDP) 'para lograr una modificación del caudal mínimo y, si lo conseguimos, se trataría de explotar a través del sector privado'.
ÁREA RECREATIVA
La inversión del embarcadero, 410.790 euros procedentes de los fondos del Fondo Estatal de Inversión Local, incluyó la creación de una infraestructura con capacidad para una veintena de embarcaciones, una zona de aparcamiento y un área recreativa con aseos. Esta zona de ocio y esparcimiento es también motivo de queja para los visitantes y usuarios de la zona. 'No hay luz pública, ni agua, ni atenciones de jardinería, y lo peor, los aseos públicos permanecen cerrados ante la incredulidad de los visitantes', enumera Francisco Villalonga.
Ante estas quejas, la alcaldesa considera que 'se pondrán en funcionamiento cuando lo haga el embarcadero'.
Yáñez considera que este problema debería haberse planteado antes de la construcción y no ahora. Sin embargo asegura que tratará de negociar con la empresa explotadora del embalse (la portuguesa EDP) 'para lograr una modificación del caudal mínimo y, si lo conseguimos, se trataría de explotar a través del sector privado'.
ÁREA RECREATIVA
La inversión del embarcadero, 410.790 euros procedentes de los fondos del Fondo Estatal de Inversión Local, incluyó la creación de una infraestructura con capacidad para una veintena de embarcaciones, una zona de aparcamiento y un área recreativa con aseos. Esta zona de ocio y esparcimiento es también motivo de queja para los visitantes y usuarios de la zona. 'No hay luz pública, ni agua, ni atenciones de jardinería, y lo peor, los aseos públicos permanecen cerrados ante la incredulidad de los visitantes', enumera Francisco Villalonga.
Ante estas quejas, la alcaldesa considera que 'se pondrán en funcionamiento cuando lo haga el embarcadero'.
