Un debut agridulce. Así fue el primer pleno ordinario presidido por el nuevo regidor celanovés, José Luis Ferro, en una sesión en la que se aprobó la bajada del sueldo y la renuncia (de él y sus ediles) a la paga extra de diciembre, pero donde tuvo que hacer valer su voto de calidad -hasta en tres ocasiones- para aprobar la subida de varias tasas municipales. La causa, la ausencia de la concejala Montserrat Álvarez Vispo.
La sorpresa y el enfado al inicio de la sesión era patente entre los 'populares' hasta el punto que, al ser preguntado por la ausencia por el portavoz del BNG Leopoldo Rodríguez, José Luis Ferro señaló que 'igual vostede sabe máis ca min, e as explicacións de por que non está debe dalas ela. Cada un é responsable dos seus actos'. Finalizada la sesión y más tranquilo, Ferro reconoció la existencia de discrepancias y declinó realizar declaraciones a la espera de nuevos acontecimientos. En la misma línea se mostró Álvarez Vispo que ayer no quiso realizar ninguna declaración, si bien fuentes cercanas a la edil aseguran que está 'cansada y descontenta' con el funcionamiento del grupo de gobierno.
En este marco (seis ediles del PP, tres del PSOE y tres del BNG), el alcalde tuvo que hacer valer su voto de calidad para aprobar la bajada de su sueldo (que fue rechazado por la oposición, entre otros motivos, por considerarlo todavía desproporcionado para un concello de apenas 6.000 habitantes), así como el incremento de la tasa de la escuela infantil y el servicio de suministro de agua, red de alcantarillado y depuración. 'Sempre lles toca pagar aos mesmos', reiteraba la portavoz socialista, María Jesús Boo, a lo que su homólogo del BNG añadía que 'estase cargando ás familias para beneficiar as empresas' en referencia a Eulen y Aquagest.
Donde sí hubo acuerdo fue en la renuncia de la paga extra del alcalde y de los tres concejales con dedicación parcial, cuya cuantía irá a fines sociales. Así como en sendas mociones para instar a la Xunta a la inclusión del camino de la Raíña Santa como ruta Xacobea y el arreglo de Ponte Pedriña, presentadas inicialmente por el BNG. En la sesión se designaron los festivos locales para 2013 (1 de marzo y 16 de agosto) y a Máximo Losada como nuevo representante celanovés en la Mancomunidad.
En este marco (seis ediles del PP, tres del PSOE y tres del BNG), el alcalde tuvo que hacer valer su voto de calidad para aprobar la bajada de su sueldo (que fue rechazado por la oposición, entre otros motivos, por considerarlo todavía desproporcionado para un concello de apenas 6.000 habitantes), así como el incremento de la tasa de la escuela infantil y el servicio de suministro de agua, red de alcantarillado y depuración. 'Sempre lles toca pagar aos mesmos', reiteraba la portavoz socialista, María Jesús Boo, a lo que su homólogo del BNG añadía que 'estase cargando ás familias para beneficiar as empresas' en referencia a Eulen y Aquagest.
Donde sí hubo acuerdo fue en la renuncia de la paga extra del alcalde y de los tres concejales con dedicación parcial, cuya cuantía irá a fines sociales. Así como en sendas mociones para instar a la Xunta a la inclusión del camino de la Raíña Santa como ruta Xacobea y el arreglo de Ponte Pedriña, presentadas inicialmente por el BNG. En la sesión se designaron los festivos locales para 2013 (1 de marzo y 16 de agosto) y a Máximo Losada como nuevo representante celanovés en la Mancomunidad.
