El equipo del Monte da Aira, que ha perdido el encuentro inaugural de liga ante el Maside, acumula 15 partidos sin traspiés
El Velle ha demostrado con creces ser el equipo más regular y el que más puntos sumó hasta el presente, 39, entre los cinco grupos de Primera en toda Galicia. Su entrenador David Rivo no quiere mirar más allá a pesar de la situación privilegiada del equipo en la liga y con un margen considerable sobre sus inmediatos perseguidores.
Todo comenzó con la única derrota del equipo.
Veníamos de jugar un partido de Copa Diputación intenso contra el Arnoia al que eliminamos y pensábamos que iba a ser fácil la liga, pero ese primer encuentro ante el Maside que se saldó con derrota fue un punto de inflexión ya que sin trabajo no haces nada.
Y el liderato llegó seis jornadas más tarde.
Creo que el equipo fue a más después de la primera jornada donde vimos lo que realmente era la competición. Nos adueñamos del liderato más que nada porque hubo equipos que no estuvieron tan bien como se esperaba, como fue el caso del Verín, aunque esto mismo nos puede llegar a pasar también a nosotros así como a otros rivales.
¿Qué ha cambiado?
El primer partido de liga lo jugamos con un sistema nuevo que vimos que no era realmente lo que el equipo quería. El trabajo constante, con hasta 20 jugadores entrenando todas las semanas y muy implicados, dio sus frutos. Ante el Maside quisimos cambiar con el 4-3-2-1 para buscar un poco más de profundidad en banda, pero no salió. Ahora jugamos con un 4-1-4-1 que es un poco más vertical, de juego más directo y a lo mejor no tan combinativo, aunque de cara al gol tenemos gente importante.
¿Gabri es el faro ofensivo?
Es un jugador que está en el Velle por las circunstancias o por lo que sea, pero él está cómodo aquí, aunque tanto Benito, Sergi, Hugo Carid y Felipe son jugadores que aportan mucho en ataque.
El equipo está compensado.
Sí, cada línea tiene dos jugadores por puesto. Está claro que la reciente marcha de Adrián Viana es una baja importante.
¿Cuáles fueron las causas de la marcha de otros jugadores?
El equipo estaba bien y seguí metiendo a los que realmente estaban mejor en cada momento. Hubo otros jugadores que ante la falta de minutos, y viendo que el equipo seguía ganando, se desanimaron y optaron por marcharse como Yago, Martín Rodríguez, Mario y Chivi.
Pero también hubo refuerzos.
El único fue Adrián Blanco, un mediocentro que llegó del Valenzá y que puede ir a más. Lo fichamos porque es un chaval joven, con futuro y hacía falta en esa posición.
Hasta ahora, ¿cuáles han sido los rivales más complicados?
Monterrei y Loñoá fueron dos de los equipos que nos apretaron mucho y nos hicieron sufrir en nuestro campo. Empatamos con el Monterrei, que había sido un pelín mejor que nosotros en agresividad e intensidad. El otro día, el Loñoá no le perdió la cara al partido en ningún momento. No logramos cerrar el partido cuando pudimos y al final nos tocó sufrir.
¿Cuál es el principal enemigo en esta lucha por el ascenso?
Hay muchos. El Allariz no dio todo lo que puede y en la segunda vuelta irá a más. Creo que el Verín es un claro candidato al ascenso y luego el Antela, que está ahí por méritos propios. Lo cierto es que nosotros tenemos que seguir sumando porque la ventaja que llevamos todavía no es decisiva.
¿El Velle busca hacer historia?
Significaría mucho igualar o superar la racha de 17 partidos sin perder (actualmente lleva 15) y sobretodo porque no es una plantilla a base de talonario. Los que han venido es porque les gusta el fútbol y se encuentran bien. En aquel Velle de la temporada 1996-97, en pleno boom del fútbol, todo el mundo cobraba. Nosotros vamos paso a paso y la razón por la cual este equipo está ahí es que en ningún momento se piensa en el ascenso.
