José Luis Cachaldora cumplirá el próximo 6 de junio un cuarto de siglo como delegado provincial de la Federación Gallega de Futbol
Hablar de la Delegación de fútbol en Ourense es hablar de José Luis Cachaldora, que cumplirá 25 años a su frente. Una persona apasionada, versátil, controvertida y tal vez desde el nacimiento de su primera nieta con un perfil más sosegado y paternalista. “Arranqué como vocal de la Federación en septiembre de 1978 y más tarde fui presidente del Comité de Competición. El 6 de junio de 1990 pasé a ser delegado provincial de la mano de Paco Paz. Tras su fallecimiento en abril de 1990, dos meses más tarde me nombró Basilio Caramés.
¿Qué enseñanzas recogió de su contacto con Paco Paz?
Hacía honor a su apellido pero era un hombre que a lo mejor no tenía influencia y me tenía como segundo de a bordo. Dejaba actuar y delegaba mucho en mi persona, sabía cuando se debía usar mano derecha o izquierda y me enseñó muchas cosas de las cuales estoy muy orgulloso de él principalmente y de su familia.
¿Se arrepiente de algo?
En la vida no se puede echar la vista atrás por si te arrepientes o no de algo. Siempre tuve bastante conocimiento de la delegación, entonces no tengo ni creo que deba estar arrepentido de nada.
¿Qué le dio y le quitó el fútbol?
No me lo quitó a mí si no a mi familia, muchísimas horas a mis hijas, a mi mujer y ahora a mi nieta. Menos mal que tengo una mujer muy comprensiva con la que llevo 46 años casado y por ese motivo conoce mis pros y mis contras, pero al ser una persona tan maravillosa no cabe la menor duda que me ayudó en todo. Ha sido siempre el alma de la casa por eso si pudiese volver atrás estoy arrepentido de no dedicarle más tiempo a los míos y por desgracia más al fútbol.
¿Pensó en dejar el cargo?
Sí, muchas veces. Cuando llega mayo y junio debido al estrés de toda la temporada estás deseando que finalice pero también es cierto que en el mes de agosto estoy pensando a ver cuando empieza.
¿Se considera una persona de fútbol o para el fútbol?
Las dos cosas. Me gusta el fútbol porque fui jugador, fui directivo y fui fundador de un club. Lógicamente lo llevo en la sangre”.
¿La desaparición de C.D. Ourense es su peor momento en este tiempo?
Como deportista tengo que sentir la desaparición de un club que representaba a una ciudad pero creo que lo más importante en la vida es la familia. La pérdida de mis padres, suegros y un hermano fue más triste.
¿Se recuperará el sitió dejado por el club de O Couto?
Va a ser muy difícil pero soy optimista para que dentro de tres o cuatro años podamos decir que en Ourense tenemos un equipo de Tercera o Segunda B.
¿Qué cosas positivas le aportó en este tiempo a la Federación?
El conocimiento de las personas y recientemente haber sido el precursor y redactor del nuevo estatuto general y disciplinario de la Federación. En cuanto a las delegaciones no solo funcionan con el delegado si no con los grandes colaboradores como en mi caso Isidro, Rogelio, Óscar, Antonio, Vila, Varela y Melón, que además no cobran y aportan trabajo en la sombra por el bien del fútbol provincial.
¿Habrá novedades la próxima temporada?
Tenemos una Tercera autonómica bastante coja en la zona de A Limia con lo cual tenemos que trabajar para que más clubes se inscriban, pero también esto se debe a que no contamos con infraestructuras deportivas suficientes para que el fútbol base y ourensano siga progresando como en Pontevedra y Vigo, donde tienen 115 campos de hierba sintética. Si aquí tuviésemos algo similar tendríamos más candidatos para Tercera y Preferente, y en el fútbol base, donde un gran número de equipos.
¿Qué respuesta espera en las próximas elecciones municipales de cara al futuro de nuestro deporte?
El deporte no está separado de la política pero no puede depender de ella. Bien es cierto que el partido que esté en el poder y su concejal de deportes debe ser una persona cercana y que se pueda contar con él para desarrollar cualquier evento en Ourense donde ojalá haya un campo en condiciones para que se lleve a cabo la promesa del presidente de la Federación Española, Ángel María Villar, poder traer un partido internacional sub 21.
