El aficionado de la UD Ourense disfrutó en “su” estadio de O Couto de la primera goleada tras la remodelación del terreno de juego, adornada con la mejor media hora de fútbol del equipo rojillo en lo que llevamos de temporada. Y la guinda a todo ello es que goleada y buen juego se plasmó ante uno de los candidatos al ascenso como el Arosa de Luisito a quien superó con claridad y lo desarboló por completo.
Era un partido clave, otro más, en el que no podía fallar el equipo de Borja Fernández, que sigue sumando puntos desde su llegada con un empate y dos victorias consecutivas y parece haber dado con la tecla en lo que a juego se refiere para todo lo que queda de temporada y play off de ascenso incluido, aunque eso tendrá que plasmarse en las próximas semanas. Y el partido duró apenas cuarenta y cinco minutos, o quizás apenas diez desde la perspectiva de un Arosa que comenzó presionando alto y llegando con facilidad a la portería de Alex Cobo, aunque sus llegadas terminaban con remates lejanos desde fuera del área, teniendo el control del partido y del medio campo hasta que dio un paso atrás en la presión y el medio campo rojillo se hizo con el control del balón y del juego.
En la grada de O Couto se pasó de temer recordar épocas pasadas y todavía recientes, a realizar un fútbol combinativo con precisión, profundidad y calidad, presionar alto y con sentido para destapar las carencias en la salida del balón de atrás del equipo de Luisito y controlar a su antojo el partido para comenzar a abordar la portería de Raúl, que ya en el minuto 16 tuvo que emplearse a fondo ante Antón Guisande tras una penetración por banda izquierda de una de las claves del partido, con Varo a banda cambiada. Un minuto más tarde Luismi falló un remate claro a centro de Antón Guisande, dos jugadores que fueron un quebradero de cabeza por su intercambio de posiciones y juego con y sin balón para la defensa del Arosa. Y tras dos avisos llegaría el 1-0 con otra penetración de Varo por banda izquierda con pase atrás para que Yelco Alfaya bata a Raúl con un gran remate.
La maquinaria ourensanista tocaba y tocaba y el Arosa estaba totalmente desarbolado, mientras Luisito ya mandaba calentar a los jugadores de banquillo a la media hora, quizás porque se temía lo que se le venía encima. Luismi cogió un balón en el área, tras un mal rechace de la endeble y nerviosa defensa del Arosa y coloca el 2-0 en el minuto 38. Pero no acabaría el asedio rojillo y el colofón antes del descanso llegaría con una jugada de orfebrería combinativa que Antón Guisande deja de tacón en la frontal del área para que llegue Varo y coloque el balón en la escuadra izquierda de la portería de Raúl, en un gol para ver repetido en varias ocasiones poniendo el colofón a un primer tiempo que encandiló a la grada dejando sentenciado el partido, algo que no recordaban ni los más viejos del lugar.
Segundo tiempo sin historia
En el descanso Luisito buscó un imposible con cuatro cambios de inicio, pero la respuesta de la UD Ourense fue un mano a mano errado por Yelco Alfaya tras robo de Antón Guisande y otra presión alta de Antón Guisande que le roba la cartera a Carlos Rivero, haciéndole penalti que Champi transformó en el 4-0 con media hora por delante para acabar un partido que ya no tuvo más historia. Solo los cambios de Borja Fernández y un gol del Arosa para paliar la goleada en los minutos de bajón de la UD Ourense, fue lo más reseñable de un final de partido en el que la afición rojilla pudo disfrutar de un triunfo clave que esperan sea el punto de inflexión que tanto se buscaba en el equipo ourensanista.
